La Policía Nacional ha desarticulado una organización a la que se le imputa el robo de, al menos, 13 viviendas en Murcia, Oviedo y Santander, según un comunicado de este cuerpo. La organización estaba formada por tres albaneses, dos detenidos en la pedanía murciana de Zarandona y otro, considerado el jefe, en Garrucha (Almería), y por un rumano. El material recuperado consta de cuatro vehículos de gama alta, herramientas y útiles para robar, el botín de los hurtos en las viviendas como joyas, televisores y aparatos informáticos y abundante documentación personal falsa y contratos de alquiler. La operación se inició el pasado mes de octubre tras detectarse la comisión de varios robos en la ciudad de Murcia y urbanizaciones cercanas con un mismo «modus operandi», según fuentes policiales.