¿SABÍAS QUE…?

El jabón ya se conocía en Babilonia hace casi cinco mil años. Lo descubrieron al mezclar cenizas con grasa de animales. Al principio se utilizaba sólo para lavar la ropa, y pasaron muchos siglos hasta que empezó a usarse para la higiene del cuerpo. Los jabones antiguos no tenían un aspecto agradable ni olían bien como los de ahora. Además, durante mucho tiempo el jabón fue un artículo de lujo. Pero los avances científicos permitieron emplear mejores ingredientes, añadir esencias aromáticas y fabricar el jabón en grandes cantidades. Hoy día existen muchos tipos de jabón, con distintos colores, olores, formas y texturas.

QUÉ ES EL JABÓN Y CÓMO LIMPIA

El jabón es el resultado de una reacción química llamada “saponificación” que se produce al mezclar un álcali con grasa, como la manteca de cerdo, o con aceite, como el de oliva. Un álcali es una sustancia que tiene metales alcalinos como el sodio y el potasio, y que es capaz de neutralizar a los ácidos. Por ejemplo, la sosa (hidróxido de sodio) es un álcali que se utiliza para desatascar los desagües. Y las cenizas contienen álcalis.

La receta original del famoso jabón de Marsella lleva aceite de oliva y otros aceites como el de palma o el de coco, agua salada y sosa obtenida de cenizas de plantas marinas. Y el jabón de Castilla contiene únicamente aceite de oliva y sosa.

¿Cómo limpia el jabón las manchas de grasa? Las moléculas del jabón son alargadas y se clavan como alfileres alrededor de las gotitas de grasa, formando una bola, llamada micela, que encierra dentro a la grasa. Las micelas sí se disuelven en el agua (la grasa sola no) y arrastran la grasa que ha quedado encerrada en su interior.

HACER JABÓN CASERO

Esta experiencia la debe realizar un adulto, con mucha precaución al manejar la sosa cáustica porque es corrosiva.

Materiales

Cuchara de madera. Molde o táper rectangular. Vasos. Cazo. Batidora y recipiente de batir. Báscula de cocina. Servilletas de papel. Material de protección: guantes de goma, gafas, delantal.

Ingredientes

1 vaso de aceite de oliva (200 ml). 1/3 de vaso de agua destilada. 25 gramos de sosa cáustica en perlas (se vende en supermercados y droguerías).

Proceso para hacer jabón de Castilla

Nos ponemos los guantes, el delantal y las gafas de protección.

Llenamos la tercera parte de un vaso con agua destilada. Pesamos en la báscula 25 gramos de sosa (un par de cucharas soperas más o menos). Echamos suavemente la sosa en el agua (nunca al revés), con el brazo extendido y alejando la cara para evitar salpicaduras. Removemos con la cuchara de madera hasta disolver toda la sosa. La reacción produce mucho calor y hay que tener cuidado de no tocar ni derramar la mezcla.

Mientras se enfría un poco el agua, en otro vaso echamos aceite hasta arriba. Calentamos un poco el aceite en un cazo al fuego, hasta unos 40 ºC. Lo echamos en el recipiente de batir y después echamos la mezcla de agua con sosa. Batimos con la batidora hasta que se produzca una pasta con textura de puré o mayonesa.

Echamos la pasta en el molde. Lo cubrimos con un trapo y lo dejamos endurecer 24 horas. Al día siguiente veremos que la pasta ya tiene aspecto de jabón. Desmoldamos el taco de jabón y lo cortamos en pastillas. Envolvemos cada pastilla en una servilleta de papel, guardamos las pastillas y las dejamos reposar durante al menos 1 mes. Es necesario esperar ese tiempo para que se complete el proceso químico y podamos usar nuestro jabón.

SABER MÁS

La medicina dio un paso de gigante cuando en el siglo XIX se demostró la importancia del lavado de manos para evitar la transmisión de gérmenes. Un ejemplo lo tenemos en la actual pandemia, ya que el jabón es un arma eficaz para destruir a los coronavirus.