No nos enteramos. O no queremos enterarnos. Cuando escribí lo del libre-mercado para todo menos para los costes productivos, o sea, laborales, creí que se había entendido. Pero no… Miren ustedes: cuando aquel tándem tan graciosico de Thatcher y Reagan proclamaron y consagraron la libre circulación de capitales, la eliminación de fronteras y la economía global a pajera abierta, estaban beneficiando a las finanzas especuladoras y abriendo la puerta a que el Estado del Bienestar se quedara en estado, y que en unas pocas décadas nos sobreviniera el malestar. No se puede cobrar según leyes que protejan la producción y gastar en productos de libre mercado. Pero lo voy a explicar con un sencillo y facilón ejemplo, a ver si sementiende, coñe…

Imaginen un panadero que desea cobrar 2.000 euros al mes produciendo 2.000 chuscos en el mismo periodo de tiempo. Debe tener muy claro el buen hombre que, cuando menos, debe comprar la barra de pan que consume a un eurillo ¿no..? Pero, claro, si abre puertas y ventanas a que entren otros con barras a cincuenta centímetros incluso él mismo acabará comprando el pan más barato, y a la larga las que produce a su costo, se las habrá de poner, a un suponer, supositoriamente, vía rectal. Con lo que una de dos: o se baja un par de escalones en su peana del Estado de Bienestar para competir con los de los dos reales, o va a volver a ganar 2.000 del ala cuando las cabras pongan huevos… Es así de simple.

Lo que pasa es que nos ha interesado creernos el cuento al revés de cómo es. Incluso cuando existían las aduanas y los aranceles proteccionistas, creíamos ingenuamente —o es que éramos tontos o es que nos lo hacíamos— que los salarios nos los subían porque subían los precios, siendo justamente todo lo contrario; los precios de los productos suben cuando suben los salarios que los producen. Por eso, lo de aspirar a ganar más y vivir mejor trabajando poco y gastando menos en productos hechos por ajenas manos con menor salario, es sencilla y matemáticamente imposible..

Y no hay más historia ni mayor ciencia económica, economista y economicista que ésta. Otro ejemplo vulgar: cuando usted, su señora, o su señora criada, versus asistenta de hogar, sale a comprar a la plaza o al mercado, compra el producto que más le gusta, le convenga o le salga de la… eso mismo. ¿No es así? ¿O acaso le obligan a comprar los tomates en un determinado puesto porque, oigan, son de calidad garantizada que-se-lo-digo-yo y usted compra donde yo quiera? No. Pues bien, lo mismo pasa con otros tomates y otros países… ¿se entiende? Es que no cumplen los estándares de calidad, y no hay derecho… Vale ¿acaso a usted se le obliga a no comprar en los chinos por ser de baja quality? ¿A que no? Pues lo mismo con los marrocos… Lo que no se puede obligar a nadie es a que nos compren según nuestros costes pero que nadie nos imponga dónde y a quiénes hemos de comprar nosotros… Lo del bueno-bonito-barato, paisa, pál muá, y lo que yo produzco, pá ti, tío, es una total y absoluta incongruencia.

Y ahí es donde yo insistía que la coherencia sindical en su reivindicación del Estado del Bienestar no se sostiene en absoluto. Y, repito lo que entonces, no estoy juzgando la bondad ni la maldad de los sistemas, si no la irracionalidad de exigir ambas ventajas sin admitir las desventajas de ambos… Y por mucho que digan, griten, canten y parcanten (de pancarta) nuestros sindis, algunos países, como Alemania mismo, hace mucho tiempo empezaron a hacer sus deberes tratando de flexibilizar en lo posible sus leyes y normas de los mercados laborales a fin de sacudirse una rigidez que ya no valía para el nuevo modelo de economía. Por eso mismo son punteros, aparte de que rinden más que nosotros un rato largo…

Porque han intentado aplicar la misma libertad laboral en las contrataciones que en el mercado. Y prefieren tener pobres por bajos ingresos a parados pobres, que son los más pobres y los de mayor costo social. Porque prefieren producir, consumir y no tener que pagar un paro que, al final, no tendrían de dónde pagarlo… Como aquí. Por cierto, a los sindicatos, a más gente para más pasta les ingresan, ¿no? Posaversivaserporeso…