Antonio González Barnés, a González Barnés, 'Joselito'

Mi querido Johnny,

Te he perdonado todo, pero esta última no te la paso. Tú no podías dejarme la corrida para mí solo. Tú tenías valor y lo has demostrado para matarla y terminar con la camada.

Desde que iniciamos este camino de la vida teníamos siete años. Hemos pasado por muchas situaciones, buenas, regulares y malas. Entre tú y yo dividimos a la afición. A ti te apoderaba Romero y a mí Rafa, el padre de Rafaelillo y Pepe Soler. Fueron listos y supieron colocarnos en las grandes ferias, con los típicos ´mano a mano´.

No sé quién toreaba mejor, si tú o yo. Pero dividimos a la afición. Sí es cierto que a ti la salud te ha dado muchas cornadas. Muchas y durante mucho tiempo. A mí una, y muy gorda. Pero la superé, gracias a Dios. Pero esto tuyo no es justo. Me dejas para siempre. ¿Qué motivación tengo para seguir en esto?

Tú ahora empezarás de tertulia con Manuel Cascales, Juanito Muñoz, Andrés Salas, Manolo González, etc. Tú ahora pasas a ser poesía. Y yo€ Ni para tentaderos.

Cierto que diste ´espantás´, pero cuando te ponías era de verdad.

Ah, te pido una cosa: guárdame una silla en la mesa, donde os juntéis a tomar café€ Tú y Andrés, porque el maestro Cascales, Juan y Manolo solo toman whisky. El día que no pueda entrar en el coche me subiré para estar contigo.

Juan Belmonte (el articulista cierra así el texto, haciendo un paralelismo entre González Barnés y Joselito, y Clemente García con Juan Belmonte).