Movilidad

Reponen más de 400 pilonas de los carriles bici de Murcia en sólo tres meses

Usuarios y colectivos de movilidad del municipio reprochan la falta de mantenimiento en las vías ciclistas

"El ejemplo más sangrante lo tenemos en la carretera de Alcantarilla", señalan

Un ciclista pasa por el carril bici, con señales semiborradas y bolardos arrancados en la carretera de Alcantarilla.

Un ciclista pasa por el carril bici, con señales semiborradas y bolardos arrancados en la carretera de Alcantarilla. / Israel Sánchez

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

El contrato de mantenimiento de los carriles bici de Murcia ya está trabajando a pleno rendimiento. Según informan fuentes municipales, desde el pasado mes de marzo se han repuesto 192 separadores tipo cebra o ciclas, 226 pilonas (los pivotes rígidos), y 200 pilonas blandas. Además, se ha colocado señalización horizontal y vertical en los carriles bici por importe de 2.000 euros. En total, en sólo tres meses, el Ayuntamiento se ha gastado a través de este contrato cerca de 26.500 euros. En cuanto a los trabajos previstos para este mes de mayo, desde el Ayuntamiento señalan que entre pilonas, aparcabicis y el arreglo del firme se van invertir otros 7.000 euros.

A pesar de todo, según algunos de los colectivos ciclistas más importantes del municipio, el mantenimiento de los carriles bici sigue siendo una asignatura pendiente para el Ayuntamiento de Murcia.

Desde MurciaLab lamentan que se esté tardando tanto tiempo en reponer los bolardos arrancados a lo largo y ancho de los itinerarios ciclistas y ponen de ejemplo lo que está ocurriendo en la Carretera de Alcantarilla. «Tardan tanto en actuar que cuando lo hacen ya han desaparecido dos o tres mas», denuncia uno de los portavoces del colectivo, José Rodríguez-Caballero, que también destaca que su colectivo ha detectado que algunos propietarios de viviendas, aunque no disponen de vado, los retiran para sacar el coche con más facilidad o para poder estacionar su vehículo en la acera.

«Aunque cada cierto tiempo sí se limpian, las líneas y señalizaciones no se repintan, tanto de los carriles bus como de bici, y en muchos sitios están ya prácticamente borradas», explica Rodríguez-Caballero, que espera que el macrocontrato de mantenimiento de los carriles coja ritmo y reduzca estas deficiencias.

Según MurciaLab, esta situación la están sufriendo especialmente los primeros carriles que se construyeron. «En los antiguos ni se ven las líneas y en los nuevos su estado es bastante malo; no sé si es que no se esperó el tiempo suficiente cuando se puso o que se ha empleado una pintura inadecuada», apunta.

Si los baches o los desniveles en la superficie ya suponen molestias y riesgos para la seguridad vial en el caso de los coches, para las bicicletas suponen un riesgo mayor, que pueden llevarte al suelo.

En este sentido, desde MurciaLab lamentan los problemas que hay con las tapas de alcantarillado. El portavoz de MurciaLab señala que «algunas se han hundido y otras se han roto o no se han colocado bien, por lo que los usuarios del carril bici van con miedo de pisarlas».

Otro de los problemas a los que tienen que hacer frente los ciclistas son las continuas invasiones. Según los colectivos vinculados con la movilidad en Murcia, la relación con los transportistas siempre está en un tenso equilibrio. Recuerdan que está terminante prohibido estacionar o parar en estos carriles y que la ordenanza prevé sanciones de 300 euros, para carriles bici y bus.

En este sentido, admiten que la falta de zonas de carga y descarga en el centro de la ciudad no ayuda a que los transportistas cumplan las ordenanzas.

Los previstos en la calle Buenos Libros o en la avenida Juana Jugan tendrán que esperar a octubre o incluso 2025

Además, hay algunas incorporaciones que atraviesan los carriles que son peligrosas y donde falta señalización. Un ejemplo lo podemos encontrar en el acceso al parquin subterráneo de La Glorieta, donde no es raro que se generen situaciones de riesgo entre los ciclistas y los conductores y no siempre es culpa de los segundos. «Hay muchas ocasiones en la que son los patinetes o las bicicletas las que se han saltado alguna señal o semáforo», reconoce Rodríguez-Caballero.

Tareas pendientes

Sobre los proyectos diseñados, financiados, pero que todavía siguen pendientes, desde MurciaLab recuerdan que falta el carril de la calle Buenos Libros, el de la avenida Juana Jugan o conectar la avenida Abenarabi con la de Reino de Valencia.

Cabe recordar que estos proyectos, tal y como informó en su momento el concejal de Movilidad, José Francisco Muñoz, están financiados con Fondos Feder, por lo que el plazo para ejecutarlos sigue vigente hasta el mes de octubre, con posibilidad de prorrogarlo un año más.

Además, recuerdan otros que han sido anunciados y de los que poco o nada se sabe, como el que se iba a realizar para conectar con la Universidad de Murcia y el de Puente Tocinos.