Murcia

Zonas verdes y mucho deporte en el parking alegal bajo la A30 en Barriomar

El Ayuntamiento ultima el proyecto ‘Vida debajo de la autovía’, pero ahora tiene que solicitar un informe a Demarcación de Carreteras

El parking disuasorio cerrado al tráfico tiene las horas contadas en Barriomar.

El parking disuasorio cerrado al tráfico tiene las horas contadas en Barriomar. / L.O.

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

El Ayuntamiento de Murcia está ultimando los últimos flecos del proyecto ‘Vida debajo de la autovía’, una propuesta que surgió de los colectivos vecinales, a través de los Presupuestos Participativos, de la zona de Barriomar-La Purísima, para reconvertir el parking alegal bajo la A30, hoy cerrado al tráfico, en una nueva zona verde con diferentes equipamientos para el disfrute de los murcianos.

Según fuentes municipales, el proyecto, en manos del Servicio de Parques y Jardines, tendrá un marcado carácter deportivo y contará con pista y zona de skate, minipista de fútbol, una zona de baloncesto, mesa de ping-pong y diversas mesas de juegos multifuncionales. Además, todo el entorno estará rodeado de vegetación y se habilitarán amplias zonas de estancia.

Sobre los plazos que se manejan para que llegue a la Mesa de Contratación y finalmente se adjudique no hay nada claro. Desde el Consistorio explican que este espacio bajo la autovía A30 es de competencia estatal y por tanto se tiene que pedir un informe a Demarcación de Carreteras para que dé luz verde a las actuaciones, algo que irremediablemente dilatará los tiempos.

Algunos vecinos de Barriomar se han puesto en contacto con esta Redacción y han expresado su hartazgo por la tardanza en que llegue la reconversión de este espacio. Recuerdan que hace más de un año que el concejal de Gestión Económica y Seguridad Ciudadana, Enrique Lorca, se comprometió en el Pleno municipal a levantar sobre los abandonados aparcamientos disuasorios un espacio verde y lúdico para los vecinos. A pesar de que se muestran satisfechos por el cierre de este parking, su apertura temporal durante el Entierro de la Sardina para que en esa zona pudieran estacionar vehículos vinculados con la logística de los sardineros ha generado cierto resquemor entre los vecinos, que ven cómo se agota la legislatura sin que este proyecto haya pasado al menos por la Mesa de Contratación, por lo que temen que se quede guardado en un cajón hasta que llegue el próximo equipo de Gobierno.

El que fuera presidente de la Comunidad de Propietarios del Edificio Volante, Mauricio Arrabal, lamenta que "en un año, el Gobierno no se haya preocupado en ningún momento de cumplir la ejecución de lo que ellos mismos había prometido, pero sí tienen en cuenta este espacio para utilizarlo para otros menesteres, como ocurrió en el Entierro de la Sardina". Recuerda este vecino que la moción que se aprobó en el Pleno, del Grupo Socialista, surgió como propuesta alternativa a una moción de Vox, que la que se solicitaba al Consistorio que acabase con los problemas de ruidos, suciedad e inseguridad vial que había generado el uso de parking disuasorio como punto de encuentro para la recogida de los trabajadores del campo, al igual que sucedía hace años en otras zonas como El Rollo o la plaza de la Cruz Roja.

Según Arrabal, estos problemas "siguen existiendo, en la misma zona, desde las 5.00 a las 7.00 horas, aparcan en la zona, dan vueltas a la manzana, y se siguen generando problemas que impiden el descanso de los vecinos".

Cabe recordar que el edil de Seguridad, Enrique Lorca, también se comprometió a afrontar este problema y buscar una nueva localización para este trasiego vinculado al transporte de los trabajadores del campo.

Por su parte, el vocal de Vox en la Junta Vecinal de La Purísima-Barriomar, Juan Andrés Orenes, asegura que si se cumplieran todas las promesas que PP y PSOE han hecho a lo largo de los años, cuando gobernaban, "La Purísima sería un barrio de élite". Según Orenes, el Gobierno socialista había prometido a los vecinos que el proyecto sobre el aparcamiento clausurado estaría realizado antes de que acabase el mandato e incluso "se vendió que el dinero estaba preparado para hacer esa obra".

Orenes lamenta que siempre pase lo mismo con la Purísima. "Todos los barrios y pedanías progresan, pero aquí no, aquí hemos sufrido un retroceso, muchos vecinos sienten que los dirigentes políticos han tratado a esta zona como la alfombra que levantas para meter la suciedad de la ciudad".