La espera ha terminado. Este domingo a las 14.00 horas se abrirán las barracas, lo que dará inicio a las Fiestas de Primavera, festejos que los murcianos estaban deseando recuperar tras la pandemia.

A las 24 barracas que se instalarán en los parques y jardines de la ciudad de Murcia este año 2022 se unirán las once que abrirán peñas huertanas en sus propias sedes. El problema que se le plantea a los murcianos y visitantes que no quieran perderse esta fiesta de la gastronomía tradicional murciana es a qué barraca ir.

Las barracas se distribuyen por prácticamente todos los barrios de la ciudad de Murcia. La mayoría se concentran en la zona central y en el entorno del río, a ambos lados, pero también las hay en la zona norte, el barrio de San Basilio y el Ranero, en Santiago el Mayor, el barrio del Infante y Puente Tocinos.

Para ayudarte a ubicar dónde se encuentra cada una de las 35 barracas, puedes consultar el mapa:

La Federación de Peñas Huertanas anunció esta semana la lista de precios que habían acordado las distintas peñas y que también se han visto afectados por el incremento de la inflación y la crisis de materias primas. De este modo, las 35 barracas, que abrirán sus puertas a los miles de murcianos y visitantes que no quieren perderse la tradición de disfrutar entre familiares y amigos de la comida más típica de la ciudad, subirán los precios entre 10 y 80 céntimos por cada bebida y tapa.

La mayor subida está en elaboraciones como la concha de zarangollo que pasa del 1,70 euros a los 2,50 euros para este 2022. Le siguen otros productos como las morcillas o los chorizos que valdrán, en esta edición, 1,30 y 1,50 euros, respectivamente, por el euro o los 1,10 que costaron en 2019 (última edición en la que se instalaron las barracas).

En cuanto a los guisos o arroces, ambos tendrán un incremento de 50 céntimos ya que este año la ración de guiso tradicional estará en 5,50 euros y el arroz en 6 euros.

Tampoco se salvan de la subida de precios los paparajotes, postre estrella de las Fiestas de Primavera. Pese a ser de los platos que menos se encarecerán, la unidad de este postre costará 1,20 euros este año, 20 céntimos más que la última edición.