Los accesos al cementerio de San Clemente están registrando este viernes largas colas que han llegado a provocar retenciones en la antigua N-340. En la entrada principal al camposanto no había ni un solo aparcamiento libre, por lo que los usuarios que acudían a este cementerio tenían que aparcar en su lateral o la parte más alta, donde se han habilitado hasta 4.000 plazas. También se han registrado colas en los puestos de flores que se han instalado con motivo de la festividad de Todos los Santos.

Los lorquinos parece que han adelantado su visita a los cementerios para evitar la masiva afluencia de público en la festividad del Día de los Difuntos. En el camposanto de San Cristóbal la presencia de público también ha sido importante a lo largo de todo el día. La Concejalía de Seguridad Ciudadana ha establecido un plan especial -que aunque entrará en funcionamiento este sábado- ya está vigente con efectivos para regular el tráfico en los momentos de mayor número de visitas.

Las retenciones en la N-340 han aumentado en la coincidencia de horario con la salida de los trabajadores del cercano Polígono Industrial de Saprelorca. El cierre temporal, por la construcción del paso inferior de San Antonio, del acceso desde la A-7 obliga al tránsito por la antigua carretera Nacional, lo que ha conllevado largas colas en algunos momentos.