"Si nos callamos, nos ahogamos", vociferaban y llevaban escrito en pancartas que habían elaborado días atrás, para exhibirlas este sábado y que se escuchase su mensaje. "Todo lo que se ha hecho pacíficamente no ha dado resultado", tiene claro Mª Carmen González, una de las vecinas de Los Alcázares que hoy, sábado, volvían a salir a la calle para reclamar soluciones tras las inundaciones que viene padeciendo el municipio.

"Nos están ahogando y nadie da soluciones", sostiene la mujer, que atiende a LA OPINIÓN mientras, junto a unas 200 personas más, intenta avanzar para cortar la carretera. No una carretera cualquiera: la autopista. Lo hicieron ya el pasado Día de la Constitución. Esta sábado, los manifestantes se encontraban con un amplio despliegue de la Benemérita. Despliegue que algunos de los vecinos calificaron de "vergonzoso". Más de cien agentes, según cálculos de los manifestantes, se encontraban en el lugar y establecieron un cordón con el cual impedían el paso de los vecinos.

"Hay guardias civiles por todos lados", indica González, a lo que añade que "no nos dejan manifestar nuestra opinión". Admite que "cortar la carretera, no se puede", aunque apostilla que "necesitamos que se nos oiga y se nos den soluciones". Mientras, unas señoras clamaban entre escombros, producidos por los destrozos que hizo el agua. Un montón de colchones y restos de muebles permanecían apilados en el punto donde se habían citado los afectados. 'Da miedo pensar en cuándo será la próxima... Tener que cerrar, mudarme... cómo rescatarán a mi familia, a mis amigos, mascota... perder todo', se leía en una de las pancartas más grandes.

Al igual que pasó el fin de semana pasado, los vecinos (muchos con chaleco reflectante, con el fin de que se les viera si llegaban a ocupar la carretera) se ponían de acuerdo mediante redes sociales y convocaban la protesta, con el corte de tráfico incluido, desde la gasolinera BP.

Corte de tráfico que, en esta ocasión, no se llevó a cabo. Los agentes del Instituto Armado desplegado para la ocasión impedían que los vecinos se introdujesen en la calzada, con el consiguiente peligro que hacerlo entrañaba, para ello y para los conductores. Los guardias civiles, además, recordaron a los presentes que hacer lo que querían hacer podía acarrearles multas de hasta 10.000 euros.

Un Taller Azul

Taller Azul Ya en septiembre, la medallista Theresa Zabell, presidenta de la Fundación Ecomar, además de consejera de varias escuelas de vela, abanderó la llamada a la solidaridad de los pueblos del Mar Menor afectados por la DANA. Con un equipo de Voluntarios Ecomar y dos coches Volvo, partieron de Madrid hasta Los Alcázares, municipio donde este sábado su fundación volvió a estar presente.

Y es que la localidad acogió un Taller Azul que nacía con el título: Cuida de los dos sitios de los que no te podrás mudar jamás, tu cuerpo y tu planeta. El punto de encuentro, el Club Náutico, en el paseo de la Concha. El objetivo del taller, hablar sobre el daño que está haciendo la basura que hay acumulada en el mar. También se enseñó a los presentes a reciclar de forma correcta. En la imagen, un momento de la iniciativa que tuvo lugar este sábado.