Bruselas alerta de la "muy difícil" situación fiscal de España y pide un plan de ajustes "creíble"

El plan presupuestario español para 2024, remitido a Bruselas a mediados de octubre por el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez, está “en línea” con las orientaciones fiscales de la UE. La Comisión Europea ha dado este miércoles su visto bueno a la prórroga presupuestaria, aunque advierte de que España afronta una situación “difícil” y “complicada”, debido a un agujero en las cuentas públicas que superará, según las últimas previsiones de otoño, el umbral del 3% tanto en 2024 como en 2025 y a una deuda pública que seguirá siendo muy elevada, del 106% del PIB, durante los próximos dos ejercicios. Bruselas reclama a España que envé un plan presupuestario actualizado “lo antes posible”.

“Los proyectos de planes presupuestarios de Eslovaquia, España, Luxemburgo y Países Bajos -que este miércoles celebra elecciones- fueron presentados por los gobiernos en funciones, en vista de la evolución de sus ciclos políticos nacionales. Se invita, por tanto, a Eslovaquia, España y Luxemburgo a presentar proyectos de planes presupuestarios actualizados lo antes posible”, señala la Comisión en el marco del llamado 'paquete de otoño' del semestre europeo y del ciclo anual de coordinación de política económica, que este año se anticipa de manera especial, dado que a finales de 2023 se reactivará la cláusula general del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) que permitirá a Bruselas poner en marcha de nuevo procedimientos sancionadores para los países que no presenten unas cuentas públicas saneadas.

La apertura de procedimientos dependerá de los datos al cierre de 2023, pero de momento son 9 los países de la Eurozona para los que Bruselas pronostica desvíos presupuestarios superiores al 3% del PIB. Es el caso, según las últimas previsiones económicas de otoño, de España, que vuelve a situarse como uno de los 11 Estados miembros -junto con Italia, Francia, Alemania, Países bajos o Hungría entre otros- con desequilibrios macroeconómicos excesivos y que será objeto de un nuevo examen por parte de Bruselas.

Estrategia fiscal creíble

“La situación fiscal en España es complicada. Claramente, será necesario establecer una estrategia fiscal creíble a medio plazo”, estiman fuentes del Ejecutivo comunitario interrogadas sobre un plan presupuestario español elaborado sin cambios de política económica por la situación de interinidad en la que ha estado el Gobierno hasta la semana pasada y que evalúa solo las medidas anunciadas hasta finales de octubre. Es decir, a la hora de hacer su análisis, los técnicos comunitarios no han tenido en cuenta el impacto de los últimos anuncios del Gobierno como la prórroga de algunas medidas energéticas que debían expirar a finales de 2023 o la rebaja del IVA para alimentos.

“La fecha límite para las medidas fiscales incluidas fue finales de octubre. Necesitaríamos ver cuáles son las medidas especificadas y tener mucha más claridad. Actualmente, (el presupuesto) está en línea con la recomendación, pero el mensaje clave aquí es que la situación fiscal subyacente es desafiante”, avisan fuentes del Ejecutivo comunitario que, no obstante, aseguran que el plan está en línea con las recomendaciones fiscales "en todos los criterios".

Medidas de apoyo energético

En líneas generales, la evaluación de Bruselas concluye que varios proyectos presupuestarios incluyen planes para aplicar políticas fiscales prudentes, retirar las medidas de apoyo energético en 2023 y 2024 y utilizar los ahorros de estas medidas para reducir el déficit. Sin embargo, “algunos Estados miembros no limitan suficientemente el crecimiento del gasto primario neto financiado a nivel nacional, y algunos no planean retirar sus medidas de apoyo energético con la suficiente rapidez -una de las medidas solicitadas desde hace meses por Bruselas a la que se ha comprometido el Eurogrupo- ni utilizar los ahorros de estas medidas para reducir el déficit” aunque “todos los Estados miembros tienen previsto preservar las inversiones financiadas a nivel nacional”.

Además del plan de España, también están en consonancia con las recomendaciones los de Chipre, Estonia, Grecia, Irlanda, Eslovenia y Lituania. En cambio, los de Austria, Alemania, Italia, Luxemburgo, Letonia, Malta, Países Bajos, Portugal y Eslovaquia no se ajustan plenamente a las recomendaciones y hay cuatro -Bélgica, Finlandia, Francia y Croacia- que corren el riesgo de no responder a las recomendaciones del Ecofin por lo que tendrán que adoptar medidas adicionales. Pese al compromiso de la Eurozona para eliminar progresivamente las medidas de apoyo energético lo antes posible seis países -Francia, Croacia, Luxemburgo, Malta, Alemania y Portugal- todavía tendrán “medidas sustanciales” en vigor en 2024. Bruselas urge particularmente a Alemania, Malta y Portugal a que las eliminen lo antes posible.

Bruselas presentará los dictámenes ante los ministros de Economía y Finanzas de la Eurozona durante la reunión del Eurogrupo de diciembre, con vistas a una discusión en profundidad en enero y a la validación de los planes presupuestarios por los líderes europeos en el Consejo Europeo de mediados de marzo.