El más auténtico sabor de la cocina mediterránea se da cita a diario, desde noviembre de 2016, en el Paseo del Puerto de Mazarrón gracias a la renovada carta que ofrecen esta nueva temporada donde rinden culto a la cocina tradicional, actualizada a 2018, con producto de mercado de primerísima calidad.
El nombre del restaurante, La Perra Chica, rinde homenaje a las antiguas monedas de pesetas, ya que 'perra chica' era el nombre coloquial con el que se denominaba a la moneda de cinco céntimos debido a que presentaba en su anverso el relieve de un extraño león que la gente confundía con un perro.
La Perra Chica, de la mano del experimentado hostelero David Colmenar Pérez, nacido en Leganés y afincado 14 años en Murcia, junto a su mujer María José Cazorla Peña, natural de Lorca, cuenta con un espectacular equipo compuesto por una quincena de empleados entre los que se encuentran Fernando, Rocío, Alfonso, Joi, Mari Carmen, Iván y Marisol.
Se encuentra situado hacia la mitad del Paseo del Puerto de Mazarrón y cuenta con excelentes vistas a la playa del Puerto. Aunque el interior del coqueto local es pequeño, sólo cuenta con seis mesas en el comedor, además de la zona de barra, cuentan con una espectacular terraza cubierta con 30 mesas, 6 barriles con sobrillas y taburetes y una pequeña barra para fumadores que da al paseo.
Los productos del mar son protagonistas indiscutibles de la oferta de La Perra Chica, como podemos comprobar en su menú degustación que, por 25 euros, nos ofrece pan rústico tostado con aceite de oliva, sal y pimentón ahumado, mejillones en escabeche suave de vermut blanco y Albariño, croqueta de jamón, tartar de atún rojo, queso chaumes con pimientos caramelizados y nueces, alcachofas con velo de tocino ibérico, dorada en suprema (con sus espinas crujientes comestibles) o secreto ibérico y postre variado, además de café. El menú incluye dos botellas de vino para cada cuatro personas.
Nueva carta
La nueva carta de La Perra Chica ofrece una amplia oferta de tapas para abrir boca antes de la comida con sus anchoas en salmuera y boquerones en vinagre, marineras o sus exquisitos puerros asados al horno de leña de Grimón, zamburiñas, caballitos, ensaladilla rusa, hueva de mújol, croquetas de sepia en su tinta con alioli de soja, o las de jamón ibérico, sus rollitos huertanos, el timbal de rabo de calabacín relleno de rabo de toro, las tostas de chiquillo caliente, tigres caseros, queso explosivo y sus patatas bravas. Cuentan también con una gran variedad de conservas como berberechos, mejillones, anchoas y caballitas y sardinillas de Cambados.
Además de tomate partido con bonito en escabeche, también lo preparan con jamón ibérico o con boquerones en vinagre. También podemos elegir una espectacular ensalada de bonito en escabeche casero.
Por raciones, cuentan con almeja japónica al pil pil de gamba roja, mejillones al vapor y en escabeche, gambas y almejas al ajillo, pulpo al horno, timbal de block de foie con mermelada de cerezas, chanquete con huevo y jamón ibérico, carpaccio de champiñón, patatas con huevos rotos, bolsa de codillo, alcachofas con jamón ibérico o tortilla de chanquete y gambar.
Pero sin duda su fuerte son sus pescados, tartar, sashimi y tataki de atún rojo, boquerones, calamares, chipirón, cazón en adobo, molla de merluza al cava y sus lubinas y doradas a la suprema. Cuentan entre sus carnes, con solomillo y lomo bajo de buey, secreto y pluma ibérica. Y hacen excelentes arroces de pulpo y de verduras y costillejas.
Además de una amplia carta de vinos, especialmente blancos, cuentan con su propia marca de cerveza.
