Carreras populares

Ramón Navarro y Mercedes Velasco repiten triunfo en la Ruta de las Fortalezas más veloz

Los cartageneros se imponen en una jornada marcada por el calor y el récord de participantes, con más de cinco mil corredores llegados de toda España

Así ha entrado en meta Ramón Navarro, ganador de la XIII Ruta de las Fortalezas

Dioni García

Dioni García

Dioni García

La Ruta de las Fortalezas es una prueba especial, diferente. No tiene parangón en todo el Levante español. En solo trece años de vida ha logrado ponerse a la altura de carreras legendarias como los 101 kilómetros de Ronda.

Es la cita que ningún runner se quiere perder. Su recorrido, espectacular, y su organización, sobresaliente, la han convertido en la más deseada tanto por los amantes de la montaña como del asfalto.

Y es que en ambas superficies se desarrollan esos poco más de 50 kilómetros por Sierra Gorda, el castillo de San Julián, la Batería Fajardo y la Atalaya, entre otros puntos, para concluir en la Escuela de Infantería de Marina General Albacete y Fuster, en la subida a Tentegorra.

Además de tener una preparación ideal, en los últimos tiempos, en los que ha subido bastante el nivel de los participantes, también se ha convertido en esencial la experiencia, sobre todo, saber dosificar las fuerzas. Y más en una jornada como la de ayer, donde el calor, impropio para esta época del año, apretó ya desde la segunda hora de carrera. Y en esas condiciones, con un trazado con más asfalto que en otras ocasiones y menos técnico, dos ‘veteranos’ ya, Ramón Navarro y Mercedes Velasco, fueron los triunfadores de la Ruta de las Fortalezas más rápida de la historia.

Navarro, un empresario del deporte de 36 años de edad, un emprendedor que dirige un centro de entrenamientos en el barrio de La Concepción, ya fue campeón de la prueba en 2018. Desde 2019 no se había puesto el dorsal de la Ruta y lo hizo para imponerse con un tiempo de 3 horas, 46 minutos y 45 segundos.

Después de un tiempo dedicándose a triatlones y la ultradistancia, su ideal inicial en 2024 era participar en equipo, pero tras ‘borrarse’ un amigo, continuó con su preparación para hacerla en solitario.

«Se ha corrido muy rápido pese a que he pasado momentos duros, pero cuando quieres ganar, tienes que saber gestionar la carrera y jugártela, pero psicológicamente estaba muy fuerte», resumió Navarro, natural de Pozo Estrecho, quien también resaltó que el calor se convirtió en un factor determinante: «Como iba solo, no me la he tenido que jugar en la Atalaya, porque si tenemos que apretar ahí, alguno lo paga por el calor porque he llegado muy justo», dijo tras recibir la bandera de Cartagena de manos del triunfador de la pasada edición, Juanan Zamora, ausente en esta ocasión.

El homenaje de Marcos Juncal

A otro ganador de la Ruta, en este caso José Antonio Agüera Martínez, quien se impuso en 2019, profesor de 45 años, el segundo puesto le supo a victoria por el sobresaliente rendimiento del ganador.

Y Marcos Juncal, militar gallego afincado en Cádiz, aprovechó su tercer puesto para rendir un sentido homenaje a un compañero buceador fallecido hace un año. Antes de entrar en meta se paró y guardó un minuto de silencio en memoria de su amigo.

Fue un momento que paralizó la carrera, sumándose todos los asistentes en la línea de meta a ese homenaje que Juncal, con lágrimas en los ojos, dedicó a su ‘hermano’ en un momento que quedará grabado en la historia de la cita cartagenera.

La diferente gestión de Velasco

A Mercedes Velasco Sánchez le seduce más entrenar que competir. Esta cartagenera de 39 años de edad, profesora en el colegio Maristas que lleva acumulando éxitos en las dos últimas temporadas -llegó a ser la plusmarquista regional de maratón-, ganó por segundo año consecutivo la Ruta (4h.27:35).

«Ha sido diferente al año pasado. No ha tenido nada que ver porque el recorrido ha sido mucho rápido, menos técnico, y la gestión, totalmente diferente», decía Velasco rodeada por sus amigas de entrenamiento, un grupo de mujeres que se han convertido en inseparables con el deporte como cordón umbilical. En todo momento mandó en la clasificación, con la matrona del hospital Santa Lucía Inmaculada Tonda, vencedora en varias ocasiones de la prueba, en la segunda plaza y que recibió durante el recorrido la noticia de que su hija Sara se había impuesto en la prueba reservada a la categoría juvenil. Y el podio lo completó otra cartagenera, Carmen Martínez Sáez, una enfermera del de 49 años de edad asidua a los podios en carreras de trail.

Las hermanas García-Pagán, cogidas de la mano

Las hermanas cartageneras Sandra y Mónica García-Pagán dejaron para el recuerdo una de las imágenes de la decimotercera edición. Ambas cruzaron la línea de meta de la prueba promo, de 25 kilómetros, cogidas de la mano, aunque la organización atribuyó el primer puesto a la primera de ellas. Ocho minutos después entró la tercera clasificada, Irene Ros Celdrán. En hombres, Pedro Manuel Paredes López lo tuvo complicado para hacerse con el triunfo ante el buen sprint final de José Manuel López Benzal. Tercero fue Alberto González Conesa.

Otra Ibarra Tonda en el podio de la prueba juvenil

El deporte impregna todos los rincones de la casa del matrimonio Ibarra Tonda. Todos sus hijos siguen el ejemplo de Antonio e Inma. Y ayer, en la prueba juvenil, como hizo hace años su hermana Eva, hoy en día una velocista de gran proyección, se impuso Sara. Covadonga Seijo fue segunda, mientras que Lucía Barrios concluyó tercera. En chicos, Rubén Serrano se hizo con el primer puesto con Javier García Bernabé y Adrián Campoy en el podio.