Xavi irá al Tribunal Supremo por un pulso millonario con Hacienda

Xavi Hernández no se da por satisfecho con la victoria parcial frente a Hacienda que decretó recientemente la Audiencia Nacional, y, según ha podido saber El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, de fuentes cercanas al catalán, el entrenador ha decidido elevar su caso hasta el Tribunal Supremo. Lo hace para defender la forma en que tributó sus derechos de imagen cuando aún era jugador del conjunto culé y, de esa forma, intentar anular completamente los 2,5 millones de euros que le reclama el fisco.

Los magistrados de la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo decretaron a principios de octubre su victoria, aunque solo parcialmente, en una sentencia a la que ha tenido acceso en primicia este periódico.

En ella se detalla cómo el técnico vehiculó su tributación a través de una sociedad a su nombre, reduciendo, según defiende el fisco, la base imponible y por lo tanto minorando los impuestos que tuvo que pagar por esos ingresos. Una "simulación", explica la sentencia, cuyo único fin era conseguir un beneficio fiscal.

Sin embargo, como ya ha ocurrido en otras ocasiones —Dani Alves, por ejemplo, se ha librado desde la cárcel de pagar varios millones de euros por un tema similar—, la justicia está reconociendo en sus últimas decisiones errores de la inspección acerca de cómo debían tributarse los derechos de imagen, y, por lo tanto, anulando liquidaciones que considera que fueron incorrectas.

En el caso de Xavi Hernández, Hacienda le reclamaba 2,5 millones de euros por el impuesto de Sociedades de los ejercicios 2013 y 2014, de los que solo se ha anulado una parte. "No queremos hablar de cantidades para no entorpecer un proceso de recurso aún abierto", sostienen ante este periódico fuentes cercanas al entrenador, desde donde transmiten optimismo con el proceso.

A pesar de ese triunfo, Xavi reclamaba varias cosas más en las que la Audiencia Nacional no le ha dado la razón, pues consideran sus magistrados que, por ejemplo, no tuvo razón a la hora de discutir cómo debían retenerse los impuestos por lo que le pagaba el Barça.

Tampoco le dan la razón en cuanto a que, a juicio de Hacienda y de la Audiencia Nacional, el hecho de que fuera el Barcelona el que pagara a la agencia de representación de Xavi por realizar un trabajo que beneficiaba al propio futbolista era una "simulación" cuyo único fin "era el beneficio fiscal" del entonces reciente campeón de la Eurocopa 2012 y del propio club.

"Las partes consiguen su objetivo, que es que [Xavi] declare menos importe de rendimientos de trabajo y el club puede descontarse un IVA soportado que de otra forma se perdería", explica la sentencia, que apunta a que se trata de un "mecanismo artificioso que necesariamente requiere de intencionalidad y conocimiento".

Facturación de los pagos

Los dos años investigados son, prácticamente, los dos últimos que Xavi pasó en el Fútbol Club Barcelona, pues en mayo de 2015 anunció su salida del club de su vida para irse a jugar a Catar. Allí se retiró definitivamente de los terrenos de juego en 2019 y allí también fue donde comenzó su carrera como entrenador antes de volver al Camp Nou.

La sentencia, que está fechada a principios de octubre, recoge cómo el entonces jugador utilizó Galileu 136, SL, una sociedad participada por él prácticamente al 100%, para "gestionar los derechos de imagen de forma exclusiva, así como los ingresos que de ella se deriven, en todo el territorio nacional".

Al entender los inspectores de Hacienda que esa fórmula estaba siendo utilizada para minorar la base imponible, y, por lo tanto, para pagar menos impuestos, se dictaron acuerdos de liquidación por esos 2,5 millones de euros en total. Ante ello, Xavi presentó recurso frente al Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC), que no le dio la razón en 2019, y después en la justicia ordinaria, que acaba de dársela parcialmente.

Mezcla el origen del dinero

La propuesta de liquidación de los 2,5 millones de euros que ahora ha anulado la Audiencia Nacional con su decisión hacía referencia a la valoración a precio de mercado de las operaciones vinculadas en el triángulo empresarial que formaban Galileu 136, el Barcelona y el propio Xavi.

Lo ha hecho, como ocurrió previamente con sus excompañeros Iniesta y Puyol, porque los magistrados de la Audiencia Nacional han considerado que Xavi tiene razón al argumentar que la Agencia Tributaria errado a la hora de calificar los pagos llevados a cabo por el club, pues no superaban los límites permitidos legalmente.

Un argumento por el que la justicia ya le dio la razón en el pasado cuando también tuvo que recurrir ante los tribunales casi un millón de euros que le reclamaba Hacienda por el mismo motivo, aunque en ese caso fue por los ejercios de 2009 a 2012.