El Plan de Reestructuración de Moreno sale adelante con la amenaza de impugnaciones

El 2023 ha sido el año en el que más veces se han reunido los accionistas del Real Murcia. Ayer fue la cuarta ocasión en los últimos doce meses, y lo hicieron para aprobar un Plan de Reestructuración que todo apunta a que va a cambiar el actual panorama de la entidad. Y es que tan solo falta que el Juzgado Mercantil dé el visto bueno a este movimiento que someterá a los acreedores del Real Murcia a una quita del 95%, lo que lo que dejará la deuda privada reducida prácticamente a cero.

Con un 79,85% de los votos a favor, cifra de la cual el 60% corresponde a las acciones de Felipe Moreno, presidente del Consejo de Administración de la entidad, este Plan de Reestructuración salió adelante. Aunque no de una manera tan cómoda como parece con ese resultado, ya que la asamblea volvió a superar las dos horas y media, a pesar de contar con tan solo un único punto del día que siempre estuvo dividido entre partidarios y detractores.

El mayor foco de debate, como parece que viene siendo habitual, residió en el intercambio de posturas entre el accionista Julián Luna y el propio Felipe Moreno. El abogado repasó el camino tomado por el empresario cordobés desde su entrada al club hasta ahora, al entender que sus acciones y decisiones actuales distan bastantes de las intenciones con las que en un principio tenía para paliar la situación económica de la entidad grana. Y sobre todo la ejecución del Plan Acordeón, implícito en este Plan de Reestructuración, que supone reducir el capital social a cero para después volverlo a aumentar.

Otro punto discordante en este debate fue el no dar por cerrado el entramado judicial existente por el paquete accionarial de Iconos Nacionales, del que es dueño un Mauricio García de la Vega que también impugnó la sesión. Felipe Moreno no quiso aclarar antes de que se produjera la votación si finalmente iba a abonar los dos millones de euros restantes en la opción de compra del paquete del empresario mexicano que finaliza el próximo 6 de enero, lo que tan solo le permitiría contar con el 66% de las acciones por ese acuerdo y por el que se mantiene el conflicto en el Supremo.

El que tampoco dio su visto bueno a este Plan de Reestructuración fue Enrique Roca. Representado por sus abogados, Alberto Martínez Escribano y Reinaldo Carrillo, mostró su disconformidad en este proceso con el envío de varios burofaxes y también con la posibilidad poder romper unilateralmente contratos con la aprobación del Plan de Reestructuración, lo que afectaría, entre otros, al firmado por el ‘naming’ actual del estadio. Situación en la que Agustín Ramos, con Fibranet, y representado ayer por José Basilio Gómez, también se guardó la posibilidad de una impugnación.

Uno de los puntos planteados ante esta situación, al depender de lo que dicte el Mercantil para que finalmente se lleva a cabo, fue la preocupación de Enrique López, de la Asociación de Accionistas Minoritarios (AAMRM), al no estar consensuado por los acreedores. Mientras que la FEPEMUR sí que desveló su intención de votar a favor de este plan al considerarlo necesario para la viabilidad del club.

Reunión con el entrenador

Ante la mala situación deportiva en la que se encuentra el Real Murcia, alejado de la zona de play off del grupo II de Primera Federación a las puertas de completar la primera vuelta, Felipe Moreno desveló que este miércoles mantendría una reunión con el entrenador, Pablo Alfaro, tras la derrota del pasado domingo en casa ante el Antequera (1-2). Además, también dijo que el técnico grana le ha pedido aligerar la plantilla para este mercado invernal, y es el capítulo de salidas lo que más preocupa al empresario cordobés.