Fútbol

El FC Cartagena saca el orgullo en Villarreal

Los albinegros remontan en La Cerámica con goles de Ayllón y Ortuño para sumar el primer triunfo de la temporada

Víctor Sánchez da la vuelta al partido con los cambios desde el banquillo

Alfredo Ortuño asiste a un compañero con la cabeza

Alfredo Ortuño asiste a un compañero con la cabeza / KMY ROS

Alfonso Asensio

Ha hecho sufrir el Fútbol Club Cartagena a su afición durante este verano con un mercado deficiente. La gestión de la plantilla por parte de la directiva, decepcionante y embarrada por las salidas de Escandell y Datkovic, se había cargado gran parte de la ilusión de los cartageneros antes si quiera de comenzar el cuarto curso consecutivo en Segunda División. El inicio de liga, nefasto en lo deportivo, desesperaba a la parroquia albinegra. No obstante, todo cambió de rumbo en La Cerámica. Ayer devolvió el equipo la confianza de los suyos -entre ellos, los más de 150 aficionados presentes en Villarreal- con la primera victoria de la temporada. 

Lo hizo a la épica (1-2), después de un mal partido que los cambios corrigieron en tres minutos con los goles de Ayllón y Ortuño. Musto, Jansson y el propio Ayllón entraron a la hora de juego y volvieron loco a un Villarreal B que tenía controlado el encuentro. Junto a ellos, todo el equipo sacó el orgullo y el coraje que llevaba dentro para certificar el triunfo. Los primeros tresp untos ya están en el casillero albinegro, que ve la vida de otro color fuera del descenso.

Una imagen del partido entre el Villarreal B y el FC Cartagena

Una imagen del partido entre el Villarreal B y el FC Cartagena / KMY ROS

El inicio de partido fue efervescente. Los locales quisieron imponerse en los primeros minutos y controlaron la pelota, además de firmar la primera llegada con un disparo de Romero que Marc Martínez atrapó sin problemas. Ante el control y la valentía de su rival, el Cartagena respondió con jugadas rápidas. Ortuño recibió un balón largo cerca de la línea de fondo escorado hacia la izquierda, encontró a Lautaro de León en el vértice del área y el uruguayo superó a su marca con un sombrero que le plantó sólo ante el meta contrario. Por desgracia, Lautaro no pudo adelantar a los suyos en la clara jugada por culpa de la buena intervención de Iker Álvarez, que palmeó el disparo cruzado. Al minuto siguiente dispuso de otra ocasión Lautaro que quedó en agua de borrajas.

Aviso y perdón

Avisó el Cartagena, pero perdonó y lo pagó. Un fuerte disparo de Ontiveros que despejó Marc precedió al primer tanto del encuentro, obra de Álex Forés con la complicidad de la defensa y el portero albinegros: profundizó Pascual por la izquierda, sirvió el centro bombeado al segundo palo sin demasiada fe hasta que apareció Forés para imprimirle fuerza y cruzar el balón cogiendo a contrapié a Marc. Fontán perdió la marca del delantero y el guardameta no acertó a despejar un balón sencillo para sufrir el 0 a 1 antes del décimo minuto.

Tras el gol le costó al Cartagena volver a entrar en calor y sólo un cabezazo de Ortuño a las manos de Iker llevó algo de peligro. No fue hasta el minuto 20 cuando el Villarreal B bajó el ritmo y el cuadro albinegro lo aumentó para poner en aprietos a los amarillos. Lautaro tuvo su tercera opción en un preciso centro de Solà -el catalán destacó en ataque- que botó en el área y le llegó en el segundo palo. No conectó la volea el delantero cuando estaba sólo en buena posición.

Las buenas subidas de Arnau por la izquierda permitieron al Cartagena ganar metros en ataque y le dieron espacio para tener la pelota en campo propio, no obstante, le costó horrores desbordar por banda y los centrales amarillos lo tuvieron muy fácil para fijar a Ortuño y Lautaro. El yeclano ganó varias pelotas por alto mientras que el uruguayo retó en carrera a la defensa, pero ninguno estuvo cerca del área.

El tramo final de la primera parte trajo consigo muchas imprecisiones y la impotencia ofensiva del Cartagena quedó patente. Verdú protagonizó varias salidas de zona desacertadas que terminaron con la cartulina amarilla por una falta en la medular. Así llegó el descanso del partido, tras un único minuto de prolongación, y quince minutos más tarde dio inicio el segundo acto con un Cartagena algo más desordenado que en la primera mitad. Los primeros compases volvieron a mostrar a un Villarreal controlador y a un conjunto cartagenero que persiguió sombras. 

Se estancó el partido y Víctor realizó un triple cambio para agitar el árbol a la hora de juego: Jansson entró por Alarcón, Musto lo hizo por Verdú y Ayllón ocupó el lugar de Lautaro. El banquillo lo cambió todo. Pronto surtió efecto, ya que el canterano a punto estuvo de marcar en su primera intervención con un disparo raso que salió rozando. Dio un paso adelante el equipo con los nuevos jugadores y se personó sin complejos en campo rival para certificar la remontada.

El empate, a 20 minutos del final

A falta de veinte minutos para el final llegó el empate. Jony Álamo encontró a Hevel en profundidad y el neerlandés centró a media altura sobre el primer palo, donde apareció Ortuño con un detalle de calidad que rompió a la zaga: Ayllón entró desde segunda línea para fusilar la meta de Iker con el exterior de su pie derecho mientras la pelota botaba con suavidad perfecta para el golpeo que puso el 1 a 1. Sólo tres minutos después llegó el tanto de la victoria.

Controló un balón largo Jansson, centró por bajo al área y Ayllón la dejó pasar en el primer palo despistando a la defensa. Ortuño recogió el testigo en el segundo y se quitó de encima al defensa con un control orientado por detrás de su pierna de apoyo. Con el balón en su lado fuerte, el de Yecla definió abajo al palo del portero poniendo el 1 a 2.

Continuó mejor el Cartagena e incluso Jairo marcó en fuera de juego tras un balón al espacio. El VAR entró para confirmar la posición antirreglamentaria. Jansson dejó una jugada maradoniana por la derecha que terminó en nada y, en los últimos minutos, el equipo controló bien el partido hasta llegar al final. Con garra y coraje se lleva el Cartagena la victoria a pesar de los aspectos por mejorar. Primera alegría para la afición cartagenera en una temporada que de momento ha comenzado regular.