Richard Saura Martínez tiene 54 años. Desde que era un niño ha recorrido a pie senderos, caminos y carreteras del municipio de Cartagena. Empezó acompañando a su padre y hace veinte años decidió llevar a un libro todos sus descubrimientos para compatirlos. La publicación ha sufrido desde entonces tres actualizaciones y acaba de salir a la venta la cuarta y última, la obra final, la que recoge cien rutas tanto por el interior como por la costa. Montañas de Cartagena. Las 100 mejores excursiones es el título del libro elaborado y editado por este vigilante de seguridad de profesión que ha convertido una afición en una pasión que ha querido transmitir a todos esos aficionados al senderismo o a correr por las montañas que cada día buscan nuevos entornos para disfrutar de la naturaleza.

Los grupos senderistas han proliferado en los últimos años. La Federación de Montañismo de la Región de Murcia, de hecho, ha experimentado un espectacular crecimiento en el número de licencias. En apenas unos años, la directiva que preside Luis Ríos ha conseguido pasar de unas 4.000 a las 11.000 licencias actuales. Porque salir a la montaña de forma segura es una de las premisas para poder empezar a visitar todos esos rincones con encanto, desde Isla Plana hasta Cabo de Palos, por el litoral, y el interior por la Sierra del Garbancillo, El Pericón o Perín.

«No necesariamente hay que estar muy preparado físicamente para hacer cualquiera de las rutas que propongo en el libro», afirma Richard Saura, quien ha elaborado la guía bajo la premisa de la accesibilidad para todos los públicos. La obra se puede adquirir en las librerías de Cartagena y también en la zona del Mar Menor, como San Pedro del Pinatar o Los Alcázares, y en Diego Marín, en Murcia. «Las he elaborado con el fin de que sea posible descubrir todos estos rincones a personas que se inician y que no exclusivamente son expertas. He evitado en todo momento que sean de alto riesgo», puntualiza Saura, quien recuerda que se aficionó al senderismo «porque me atraía la nieve y empecé a hacer excursiones. Era un niño entonces y sigo ahora con 54 años de edad». La influencia que ha tenido sobre este cartagenero el alpinista francés Gaston Rebuffat queda reflejada en el libro, que recoge algunas de sus citas célebres.

«Sus publicaciones me hicieron soñar de niño con el alpinismo», dice sobre el galo. «Me pasaba muchas noches leyendo sus aventuras que aún guardo con cariño. También veía en televisión sus documentales y fui hasta Chamonix para visitar su tumba. Me hubiera gustado conocerle», dice.

El experto senderista cartagenero recomienda tres rutas que no debe perderse nadie. «Una visita obligada es Calblanque por el interés que tiene este entorno natural». Paseando por este parque natural, el senderista puede encontrar una gran diversidad de especies botánicas, como el araar, sabina mora, jara, palmitos, artos, cornicales y aliagas. Ver volar especies como el halcón peregrino, el búho real y el águila perdicera, así como el rasall, las cigüeñuelas, los flamencos, las garcetas, las avocetas, los chorlitejos, los archibebes y las gaviotas también es común.

La segunda ruta que recomienda Richard Saura también transcurre por el litoral, pero en este caso por la sierra de la Muela y Cabo Tiñoso. El interés que encierra esta zona está en torno a su paisaje. Subir hasta la batería militar de Castillitos y realizar una visita, admirar el paisaje abrupto y los fondos marinos de agua cristalina, que son un entorno ideal para bucear y admirar sus padreras de posidonias, son algunos de los encantos que encierra esta ruta.

Y, por último, el autor del libro recomienda al caminante que se adentre en Peñas Blancas, donde encontramos un macizo vertical de 600 metros de altura que es el punto más alto de Cartagena. También se pueden visitar las minas del entorno y la orografía ofrece la oportunidad de hacer escalada y espeleología. «Peñas Blancas es un tesoro natural cercano a la ciudad. Todo el mundo debería subir al menos una vez en su vida. La naturaleza le condedió el título de montaña más alta y yo le doy el de más bella. Es la montaña de mi vida, la que he subido más veces, donde encuentro soledad en su cima, libertad y energía para afrontar los problemas del día a día», explica este montañero que fundó hace años el Club Alpino Cartagena y que está federado con el Mandarache.

Desde que hace veinte años publicó su primer libro Richard Saura, el entorno ha ido cambiando. Por ello ha tenido que realizar un gran trabajo de actualización: «Hay senderos que se han convertido en caminos, otros en carreteras asfaltadas e incluso en algunos sitios me he encontrado que han construido un chalet unos años después», dice el autor, quien añade que «el trabajo ha sido durísimo para poner al día cada una de las rutas propuestas. Por ello este es el último libro que publico porque no tengo tiempo y considero que ahora sí es una obra muy completa».

Por último, Saura da tres consejos básicos para poder salir a la montaña: «Dejarse acompañar por expertos en las primeras salidas, adquirir una buena preparación física y realizar marchas según el nivel técnico y físico de cada uno», termina diciendo.