Economía

La Croem arrancará el viernes el proceso para relevar a Albarracín

La junta directiva convocará la asamblea en la que será elegido el sucesor

Miguel López Abad es considerado el candidato más probable

Miguel del Toro, José Rosique, José María Albarracín y Tomás Zamora.

Miguel del Toro, José Rosique, José María Albarracín y Tomás Zamora. / Juan Carlos Caval

María José Gil

María José Gil

La Croem dará el próximo viernes el pistoletazo de salida para el relevo de José María Albarracín, que ha anunciado su intención de dejar la presidencia de la patronal regional antes del verano. La junta directiva de la organización empresarial prevista para el día 26 será la encargada de convocar la asamblea general para el mes de junio, en la que debe ser elegido el sucesor de Albarracín, que llegó a la presidencia en noviembre de 2013.

El plazo de presentación de candidaturas se cerrará en torno al 10 de junio, por lo que falta menos de dos meses, pero aún no se ha desvelado el misterio que el presidente saliente guarda celosamente. Se espera, por tanto, que dé a conocer el viernes el nombre del candidato que propone como sucesor.

El presidente saliente, que ha alargado su mandato dos años para evitar que el relevo coincidiera con la etapa de crisis provocada por la pandemia, defiende a capa y espada que habrá un nombre de consenso. Su intención es evitar que se produzca una confrontación entre posibles aspirantes, tal y como ocurrió en las dos ocasiones anteriores.

El empresario que es considerado hasta ahora como el posible sucesor designado es el del presidente de la Cámara de Comercio de Murcia, Miguel López Abad, aunque no se ha pronunciado cuando se le pregunta. López Abad también fue aspirante a la Fremm y llegó a la presidencia de la corporación cameral con el apoyo de Albarracín.

Sin embargo, después de tantos meses de especulaciones, los empresarios no descartan que haya «un tapado» y que el presidente de la Croem dé a conocer un nombre inesperado, de igual forma que fue propuesto el propio Albarracín en 2013.

Aunque él no pertenecía entonces al núcleo duro de la cúpula empresarial, había presidido la Asociación de la Empresa Familiar (Amefmur), de la que también procede López Abad, y contaba con el aval de las grandes compañías de la Región, muchas de las cuales pasaron a convertirse a partir de entonces en asociadas adheridas, que hicieron posible el saneamiento de las cuentas de la patronal, muy tocadas entonces.

No se descarta la presentación de un aspirante alternativo que obligue a celebrar una votación

El presidente saliente ha ido incorporando nuevas organizaciones empresariales a lo largo de sus once años de mandato, como la federación de autónomos ATA o las cofradías de pescadores, uno de los últimos sectores que se ha integrado en la Confederación.

Además del saneamiento de las cuentas, los empresarios valoran especialmente la labor que ha realizado Albarracín para aglutinar al empresariado de la Región, al que ven más unido que nunca. Sin embargo, no se descarta que vuelva a presentarse un candidato alternativo con el que nadie había contado, tal y como ha ocurrido en los últimos procesos electorales.

A finales de año se produjo también el relevo en la secretaría general de la Croem tras la jubilación de José Rosique, que ha sido sustituido por Ramón Avilés.

La patronal estrenó las urnas hace 22 años con Miguel del Toro

Cuando José María Albarracín anunció su candidatura a la presidencia de la Croem en 2013 se presentaron otros dos aspirantes dispuestos a competir con él: el actual presidente en funciones del Puerto de Cartagena, Pedro Pablo Hernández, que entonces estaba al frente de la patronal comarcal de Cartagena COEC; y el presidente de Fecoam, Santiago Martínez, que se retiró antes de la confrontación electoral.

La Croem había celebrado la primera votación con una urna para elegir a su presidente en 2002, cuando Miguel del Toro y el fallecido expresidente de la Fremm Francisco Pellicer se disputaron el puesto. Los empresarios aguardan ahora con expectación la propuesta de consenso de Albarracín, que lleva meses preparando su sucesión.