Medio ambiente

Cuenta atrás para la entrega de iguanas y animales venenosos en la Región

El Viernes Santo es la fecha para que los propietarios de estas mascotas las traspasen por considerarse ilegales, según la Ley de Bienestar Animal

Uno de los ejemplares, en una foto de archivo, que debe ser entregado a las autoridades.

Uno de los ejemplares, en una foto de archivo, que debe ser entregado a las autoridades. / PIXABAY/EDOFs1

Jose Antonio Sánchez

Jose Antonio Sánchez

La Ley de Bienestar Animal dio seis meses de margen para la aplicación de algunas disposiciones como la que trae de cabeza a los propietarios de especies exóticas como las iguanas o reptiles con venenos que puedan suponer un riesgo grave para la integridad física o la salud de personas y animales. Tanto como que estas personas tienen que entregar a los servicios públicos sus mascotas.

Mañana acaba el plazo para la comunicación de la tenencia de estos animales considerados peligrosos por la nueva ley, paso previo a que se tengan que deshacer de ellos. En la lista de animales que tienen que ser comunicados están: peces, anfibios y artrópodos -como las arañas- venosos, los reptiles venenosos y todas las especies de reptiles que en estado adulto superen los dos kilos de peso a excepción de las tortugas. Así como los primates, los mamíferos silvestres que en estado adulto pesen más de cinco kilos o las especies invasoras o protegidas.

Cuando se trata de especies exóticas, la Consejería de Medio Ambiente les comunica que las tienen que entregar al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de El Valle. Mismo procedimiento que con el resto de especies, con su puesta a disposición de centros de protección de animales silvestres, zoológicos o entidades de protección animal, según establece la propia Ley de Bienestar Animal.

La clave

Los dueños de los animales 

Tienen que autodenunciarse y ceder esas especies prohibidas a centros de fauna de la Región

De no hacerlo se enfrentan a sanciones que oscilan entre los 500 y los 200.000 euros para las más graves

José María López, miembro de la junta directiva de la Federación Fauna, asegura que «la Región de Murcia es la única que ha hecho los deberes de toda España» porque ha creado un formulario específico en la sede electrónica para comunicar la tenencia de este tipo de animales. Por ese mismo motivo, desde la agrupación realizaron una solicitud de información a la que ha tenido acceso La Opinión.

En esa solicitud, con más de cinco meses de plazo para comunicar la tenencia de este tipo de mascotas, preguntaban a la administración regional cuántas declaraciones de ejemplares y de qué tipo se habían realizado. La respuesta: «Hasta la fecha (07/03/2024) no se ha producido comunicación alguna, por lo tanto, no disponemos de datos de números de ejemplares y de qué tipo».

Todos los reptiles que de adultos pesen más de dos kilos tendrán que ser llevados al Centro de El Valle

Una respuesta que consideran lógica, porque nadie va a querer entregar a su mascota, aunque desde la Federación alertan que el problema es que, por cualquier motivo, las autoridades «entren a tu casa sin que se haya producido esa declaración». En ese caso se enfrentarían al régimen sancionador que va desde los 500 euros hasta los 10.000 en el caso de infracciones leves y que asciende hasta los 200.000 euros en el caso de las muy graves. Para Fauna también queda claro que las especies invasoras que estuviesen sin declarar en su día deben, por esta disposición, ser autodenunciadas y entregadas, «quedando, si no se hace, expuestos al régimen sancionador de esta norma».

La Ley de Bienestar Animal establece como animales de compañía los perros, gatos, hurones, los que aparezcan en la lista de especies domésticas de compañía, las que aparezcan en el listado positivo de animales de compañía, los animales de producción que hayan perdido su fin productivo y que su titular decida mantenerlos como animal de compañía, como podría ser el caso de una vaca, así como las aves de cetrería y animales de acuariofilia no incluidos como especies exóticas invasoras.

Recuerda que para el establecimiento del listado positivo se han dado un plazo de dos años para evaluar si, por ejemplo, el hámster, la cobaya o el periquito son adecuados para ser mascota o no. «Para el resto de animales se les da un margen, pero para los reptiles de más de dos kilos no», concluye.