El Gobierno paraliza por tercera vez en tres meses el Trasvase

Por tercera vez desde el pasado mes de octubre, obras de mantenimiento van a obligar a cortar de nuevo el trasvase Tajo-Segura. Es el tercer parón en el actual año hidrológico, que empieza a contabilizarse a partir de octubre, y en cada ocasión cada paralización ha tenido cerca de un mes de duración. El nuevo corte se produce con los pantanos del Segura al 18% de su capacidad. El Gobierno regional, la Diputación de Alicante y la Generalitat Valenciana coordinaron el pasado viernes estrategias para oponerse a los recortes en el agua.

En octubre, el trasvase Tajo-Segura se paralizó por obras de mantenimiento en La Roda de Albacete. Un corte que duró dos meses hasta finales de diciembre. En enero se volvió a cortar durante casi un mes y a los pocos días de haberse reanudado los trabajos hay ya un tercer corte.

Cuando a finales de enero se reanudaron los envíos de agua había cerca de setenta hectómetros cúbicos de agua pendientes por todos los meses en los que se había cortado el acueducto. Poco más de una semana después llega un nuevo corte. Al parecer por obras de mantenimiento en el tramo del trasvase entre Bolarque y Aranjuez no está circulando agua en toda la semana.

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En estos momentos, el agua del Trasvase que se está recibiendo en los pantanos de la Región, Alicante y Almería procede de lo que se impulsó en días anteriores. Sin embargo, este fin de semana el agua dejará de fluir y se cortarán los envíos hasta el 28 de febrero. Esto es, este febrero apenas llegarán los recursos del Trasvase. Una circunstancia que se produce en plena alerta por sequía y cuando se está pendiente de declarar la alerta por sequía en la Confederación Hidrográfica del Segura el próximo 1 de marzo.

Hasta el pasado lunes 5 de febrero, el agua del trasvase en el tramo entre Bolarque y Aranjuez estaba fluyendo a un ritmo de 15 metros cúbicos por segundo. Fuentes cercanas a los regantes precisaron que el agua del trasvase se bombea desde el pantano de Bolarque se eleva a la Bujeda, ambos en Guadalajara. Este último cuenta con una capacidad de siete hectómetros y de ahí empieza el recorrido. Este pantano se encuentra en estos momentos vacío y no se prevé que vuelva el agua hasta el próximo 28 de febrero. En los próximos días en cuanto termine de llegar lo enviado, el grifo del trasvase se cerrará de nuevo.

Frente común

Representantes políticos y técnicos del Gobierno regional, la Diputación de Alicante y la Generalitat Valenciana se reunieron este viernes en Alicante con el objetivo de coordinar y perfilar los argumentos de defensa del trasvase Tajo-Segura, tanto en lo relativo al aumento de los caudales ecológicos, recurrido por las tres administraciones ante el Tribunal Supremo, como a la actualización de las reglas de explotación de este acueducto que el Ministerio abordará próximamente.

El director regional de Agua, José Sandoval, el presidente alicantino, Toni Pérez, la vicepresidenta primera y diputada de Ciclo Hídrico, Ana Serna, así como el secretario autonómico de Medio Ambiente de Alicante, Javier Sendra, y la directora de Agua en Valencia, Sabina Galindo, participaron en este encuentro de trabajo junto a expertos hídricos.

Durante la reunión, y en relación con el aumento de los caudales ecológicos fijados en la nueva planificación hidrológica del Tajo, se expusieron los diferentes argumentos técnicos y jurídicos que tanto de la Comunidad, la Diputación de Alicante, y la Generalitat recogen en sus demandas ante el Tribunal Supremo, que en el caso de las dos primeras administraciones se deben formalizar próximamente. El objetivo, tal y como apuntaron al término de la reunión, ha sido «poner en común las estrategias y coordinar la defensa para reforzar de esta forma la posición del levante español ante la nefasta política hídrica del Gobierno de Pedro Sánchez».

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La arbitrariedad y falta de justificación en la fijación de los caudales, que crecen gradualmente hasta los 8,6 metros cúbicos por segundo de media en los tramos afectados sin que existan estudios técnicos que avalen la subida escalonada, o la falta de coordinación de los planes de cuenca son algunos de los principales argumentos que sostienen estas tres administraciones, que acompañarán sus demandas de diferentes estudios e informes elaborados por expertos sobre el impacto socioeconómico, medioambiental o hidrológico del recorte del Trasvase. Los técnicos volvieron a poner de manifiesto que el aumento de los caudales «no garantiza una mejor preservación del ecosistema o de la calidad de las aguas».

Respecto a las normas de explotación, que deberían actualizarse, se abogó porque la Región, Alicante y Valencia «hagan causa común» y planteen al Ministerio una propuesta conjunta en relación con esta cuestión, que supone también un recorte en el agua trasvasada al Segura. La propuesta pasaría, entre otras cuestiones, por crear un grupo de trabajo técnico entre Administración Central y comunidades autónomas para abordar la actualización de las reglas de explotación.

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Pendientes de la emergencia por sequía permanente

Abocados a la declaración de sequía extraordinaria. Éste es el escenario que se abrirá a partir del 1 de marzo en la Confederación Hidrográfica del Segura ante la ausencia de lluvias. Entre las medidas extraordinarias que previsiblemente se adoptarán está el aumento de las restricciones al regadío que podrían ser de hasta un 50 por ciento y la puesta en marcha de los pozos de sequía. Las restricciones de agua a la población por el momento no están contempladas en esta hoja de ruta, donde se considera que se cuenta con suficientes recursos, principalmente procedente de las desaladoras para garantizar el abastecimiento. El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura ya dijo que tendría que llover durante un mes y medio de manera continúa para salir de la situación.