Universidad

Educación y la UMU unen fuerzas para luchar contra la violencia escolar

El proyecto ‘Mente Sana’, que este curso llega a seis institutos de la Región, busca mejorar la convivencia en las aulas y reducir los casos de ansiedad y estrés entre los alumnos

Alumnos del IES Francisco Salzillo (Alcantarilla), durante las sesiones del proyecto.

Alumnos del IES Francisco Salzillo (Alcantarilla), durante las sesiones del proyecto. / EDUCARM

Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

El ámbito de la enseñanza ha encaminado sus acciones en los últimos años a abordar un problema de primer orden que preocupa tanto a profesores, a padres y a los propios alumnos. La salud mental y el bienestar emocional de los jóvenes está atrayendo el interés de las políticas educativas que, poco a poco, van creando proyectos mediante alianzas con instituciones o entidades para plantear soluciones a pie de aula.

Este curso, la Consejería de Educación y la Universidad de Murcia van a llevar a un escalón superior el proyecto ‘Mente Sana’, enfocado en la lucha contra la violencia escolar, el cuidado de la salud mental, la mejora de la convivencia escolar y la reducción de los casos de depresión o estrés entro los más pequeños.

Seis institutos, con la colaboración de los Equipos Específicos de Convivencia Escolar, iniciaron el pasado mes de septiembre este proyecto que nació en el Servicio de Psicología Aplicada (SEPA) de la UMU y cuyo coordinador es el profesor José Antonio Ruiz Hernández. Financiado por el Club Rotary Murcia Norte, en dicho plan colaboran tanto la Consejería de Educación como la Federación de Salud Mental de la Región de Murcia.

El proyecto está organizado en módulos temáticos, cada uno compuesto por un conjunto de entre ocho y diez vídeos. Uno de ellos va dirigido al profesorado, ya que incluye fundamentos técnicos y científicos que ayudan a explicar cómo implementar las herramientas que ofrece el plan en la propia clase. El resto de vídeos, con una duración aproximada de entre 30 y 50 minutos, están diseñados para su aplicación en el aula con la supervisión y coordinación del profesorado. Los alumnos tendrán contenidos teórico-prácticos y propuestas para fomentar el debate y la reflexión en el aula.

El programa consta de dos módulos, el primero basado en el programa ‘Cuenta Conmigo’, dirigido a la mejora de la convivencia y la reducción de la violencia escolar. En esta parte del proyecto se busca también desarrollar habilidades sociales y aprenden a controlar conductas impulsivas entre los alumnos.

El segundo módulo está adaptado al programa ‘Habilidades para la Vida’, diseñado para la reducción de la sintomatología ansiosa y depresiva y la prevención del comportamiento autolesivo en menores. «Pretende dotar a los jóvenes de herramientas básicas para mejorar su bienestar psicológico y protegerlos del efecto de experiencias adversas y de factores de riesgo que puedan afectar a su capacidad para desarrollar todo su potencial de forma sana y equilibrada», apuntan desde Educación.

El programa se puso en marcha el pasado curso de forma experimental en el IES Francisco Salzillo (Alcantarilla), participaron 157 alumnos de 1º y 2º de la ESO, y debido al éxito se realizará este curso en seis centros más.

El cuidado de la salud mental en los más pequeños pasa, como refleja uno de los módulos del programa educativo, por planificar el futuro y abordar la desesperanza. Los contenidos plantean como necesario que los alumnos aprendan a desarrollar un plan de vida por objetivos: «La proyección en el futuro son elementos fundamentales para enfrentarse a las crisis y tener un rumbo vital. Es importante manejar los pensamientos negativos basados en la visión catastrófica».

Con esto, se deben entrenar las habilidades sociales en un mundo donde las relaciones que mantienen los estudiantes «dependen, en gran medida, de su adaptación, éxito y equilibrio emocional». En cuanto a la exposición al estrés, afrontar situaciones de este tipo y gestionar las emociones «son fundamentales para inmunizarnos frente al estrés y sus consecuencias nocivas para la salud. En importante minimizar el sufrimiento psicológico».

En el módulo ‘Cuenta Conmigo’, se perseguirán objetivos como movilizar a la comunidad educativa de cada centro para alcanzar un compromiso con las normas de convivencia escolar y el respeto mutuo; sensibilizar sobre los efectos de toda clase de violencia escolar (verbal, social y física); desarrollar habilidades emocionales y sociales fundamentales para la convivencia escolar y la prevención del acoso o dejar de ver la violencia escolar como una forma de diversión, de resolver conflictos interpersonales o como una estrategia para sentirse superior a los demás.

Visionar un futuro, tener un rumbo vital y saber enfrentarse a las crisis

El cuidado de la salud mental en los más pequeños pasa, como refleja uno de los módulos del programa educativo, por planificar el futuro y abordar la desesperanza. Los contenidos plantean como necesario que los alumnos aprendan a desarrollar un plan de vida por objetivos: «La proyección en el futuro son elementos fundamentales para enfrentarse a las crisis y tener un rumbo vital. Es importante manejar los pensamientos negativos basados en la visión catastrófica».

Con esto, se deben entrenar las habilidades sociales en un mundo donde las relaciones que mantienen los estudiantes «dependen, en gran medida, de su adaptación, éxito y equilibrio emocional». En cuanto a la exposición al estrés, afrontar situaciones de este tipo y gestionar las emociones «son fundamentales para inmunizarnos frente al estrés y sus consecuencias nocivas para la salud. En importante minimizar el sufrimiento psicológico».

En el módulo ‘Cuenta Conmigo’, se perseguirán objetivos como movilizar a la comunidad educativa de cada centro para alcanzar un compromiso con las normas de convivencia escolar y el respeto mutuo; sensibilizar sobre los efectos de toda clase de violencia escolar (verbal, social y física); desarrollar habilidades emocionales y sociales fundamentales para la convivencia escolar y la prevención del acoso o dejar de ver la violencia escolar como una forma de diversión, de resolver conflictos interpersonales o como una estrategia para sentirse superior a los demás.