Medio ambiente

La Oficina Técnica del Mar Menor advierte que la laguna se encuentra en desequilibrio medioambiental

El Ministerio ha emitido un informe con el que arroja luz sobre las toneladas de nitratos y fosfatos que acabaron en el Mar Menor durante el pasado año

La Opinión

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Durante 2022 entraron al Mar Menor 456 toneladas de nitratos, procedentes del acuífero Cuaternario, directamente o a través de ramblas. También entraron 18,5 toneladas de fosfatos, transportados a través de avenidas, u originados por arrastres de tierras de cultivo o lavados de suelos, en los que se encuentran elevadas concentraciones debido a fertilizantes orgánicos. Otro foco de fosfatos fueron las balsas de purines y las ramblas de la Sierra Minera.

Son datos que desprenden un informe realizado en por la Oficina Técnica del Mar Menor, que surge de la colaboración conjunta de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) y la Dirección General del Agua, dependiente de Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Del documento se desprende un exhaustivo análisis sobre las diversas procedencias de elementos contaminantes que perjudican el estado del Mar Menor, que se encuentra en situación crítica desde hace años.

El Ministerio apunta al regadío intensivo como una de los orígenes de contaminación, fuente de nitratos y fósforo. También precisa que la elevación del nivel freático del acuífero Cuaternario -la capa de agua superior que discurre principalmente bajo el Campo de Cartagena- ha provocado que las ramblas conectadas con él tengan un caudal en constante desembocadura.

Las precipitaciones, señalan desde la Oficina Técnica del Mar Menor, tampoco ayudan: provocan infiltraciones en el suelo, aumentan los niveles de agua de los acuíferos contaminados , y elevan los niveles piezométricos -la profundidad entre las capas superiores del acuífero y las inferiores-.

Desde el Ministerio calculan que en la albufera se produce una recarga media de 48 hectómetros cúbicos a través de precipitaciones, y de 18,2 a través infiltración por retorno de riego.

La extracción de aguas subterráneas mediante sondeos profundos para captar acuíferos inferiores ha propiciado también la contaminación del acuífero Cuaternario, el único apto para su uso en cultivos.