La Opinión de Murcia

La Opinión de Murcia

Medio Ambiente

Las plantas solares de El Algar, "inviables" para Medio Ambiente

La Consejería reconoce que la construcción de los parques fotovoltaicos previstos en el arco sur del Mar Menor produciría "un gran consumo de los recursos del suelo y la biodiversidad"

Un parque fotovoltaico construido en el entorno de El Algar, cerca del camino del Sifón. IVÁN URQUÍZAR

La falta de ordenación territorial para dar un encaje sostenible a los parques fotovoltaicos ha puesto en pie de guerra, y en varias ocasiones, a los vecinos de varias localidades de la Región en los últimos años. El último episodio está en la diputación cartagenera de El Algar, donde más de una decena de plantas solares se proyectan en torno al pueblo, a escasos metros del núcleo urbano. El malestar social comienza ahora a extenderse a otras localidades, como Los Belones, donde se prevén nuevos huertos solares.

La posibilidad de transformar las fincas de regadío intensivo en nuevas instalaciones fotovoltaicas es una opción que permite la Ley del Mar Menor, y esto ha ocasionado un gran interés de compañías de energías renovables sobre la comarca. Sin embargo, la Consejería de Medio Ambiente ha advertido en un informe del impacto ambiental negativo que supone la construcción, en este caso, de todos los proyectos previstos en torno a El Algar, pero también en terrenos de la diputación de Alumbres o el municipio de La Unión (en total suma hasta nueve parques solares, uno de ellos ya construido).

El documento, que corresponde a un informe de impacto ambiental sobre un parque solar de 15 hectáreas que operaría con una potencia de siete megavatios -denominado Las Moreras-, recoge una valoración global de gran parte de las plantas previstas en la cuenca al sur del Mar Menor. «El desarrollo de todas ellas produce un gran consumo de los recursos del suelo y la biodiversidad, con una clara y significativa afección a especies de flora protegida, a los hábitats de interés comunitario y a la fauna protegida», señala el departamento de Patrimonio Natural, dependiente de la Dirección General de Medio Ambiente.

Estos proyectos señalados por los técnicos de la Consejería en el informe ocuparían una superficie de 200 hectáreas, a las que se añadirían otras 15 del proyecto evaluado. Como conclusión, remarcan que la impulsión de todos los parques fotovoltaicos propuestos en el entorno de El Algar «es inviable si no cambian su ubicación y superficie». Esto se debe, subrayan, a que los nueve huertos «sobrepasan la capacidad de carga del área» para la nidificación del búho real, una especie catalogada como ‘amenazada’ en la Región de Murcia.

Ante este resultado, Medio Ambiente señala que es «absolutamente necesario la evaluación de los impactos sinérgicos del conjunto de los proyectos».

«Alteración permanente»

En la resolución del departamento de Vázquez sobre la planta solar Las Moreras se concluye, además, la necesidad de someter el proyecto a una evaluación más exhaustiva, dado que la instalación «puede producir una alteración de carácter permanente o de larga duración y, por tanto, producir efectos significativos sobre la biodiversidad».

Debido a que la planta pretende ubicarse en una parcela de «alto valor natural para la fauna y la flora, y siendo estas cualidades escasas en el entorno», el estudio de impacto ambiental del proyecto debe plantear otras alternativas en las «abundantes parcelas circundantes» que consisten principalmente en cultivos de regadío intensivo o polígonos industriales.

Los técnicos también han remarcado la falta de documentación en el análisis de impactos en el medio natural que ha aportado la empresa promotora.

Compartir el artículo

stats