Economía

El sueño truncado del aeropuerto de Corvera

La pandemia obligó a suspender los vuelos apenas catorce meses después de su inauguración

Pasajeros del primer vuelo que recibió el aeropuerto de Corvera procedente de Reino Unido el 15 de enero de 2019. | J.C.

Pasajeros del primer vuelo que recibió el aeropuerto de Corvera procedente de Reino Unido el 15 de enero de 2019. | J.C. / M.J.G.

María José Gil

María José Gil

El aeropuerto de Corvera cumple cuatro años este domingo sin haber llegado a alcanzar las expectativas con las que se abrió. El sueño de disponer de un aeropuerto propio alentado durante varias generaciones se ha visto truncado por la pandemia, dado que los vuelos quedaron suspendidos apenas catorce meses después de su apertura. Su inauguración fue uno de los grandes acontecimientos que vivió la Región después de varios lustros de disputas legales con la sociedad que construyó sus instalaciones, liderada por la constructora Sacyr, pero la crisis sanitaria ha impedido que pudieran materializarse las previsiones de auge turístico.

Aunque estaba prácticamente terminado desde 2012, el aeropuerto permaneció cerrado casi siete años, hasta que el Gobierno regional se decidió a rescindir el contrato a la concesionaria que había ganado en 2007 el concurso convocado por la Comunidad Autónoma. El conflicto con la sociedad Aeromur, a la que había avalado el Gobierno regional para que pudiera conseguir el crédito de 200 millones con el que se pagó la mayor parte de las obras, obligó a la Administración regional a asumir la deuda bancaria y un coste financiero estimado en unos 22.000 euros diarios, que resultó un trauma difícil de asimilar. La inversión total rondó los 280 millones, pero la liquidación de cuentas con Aeromur aún está en los tribunales.

Por eso su inauguración supuso una inyección de optimismo para una región que empezaba a salir de la crisis y confiaba en lograr un despegue turístico, empañado ahora por la crisis del Mar Menor.

Cuatro años después de su inauguración, Corvera ha conseguido recuperar en 2022 el 77% de los pasajeros que alcanzó en 2019, antes de la pandemia. y ha recibido 838.940 usuarios.

Captar a los murcianos que vuelan por Alicante y lograr la conexión con Madrid son las asignaturas pendientes

Sin embargo, esta cifra sigue muy lejos de los 2.002.949 que pasaron por el aeropuerto de San Javier en 2007, el mismo año que se adjudicó la construcción de Corvera a Aeromur. A partir de entonces se inició el declive y en 2008 el número de usuarios ya se había reducido a 1.876.255. El último año de San Javier, 2018, pasaron por sus instalaciones 1.273.774 viajeros.

Hasta que Corvera no iguale estos números no estará claro si valía la pena el enorme esfuerzo económico que costó el nuevo aeropuerto. Además de ser capaz de captar a los murcianos que siguen viajando desde Alicante, porque los vuelos son más baratos y hay más oferta, Corvera sigue teniendo pendiente la asignatura de las conexiones con Madrid y Barcelona.

Hasta ahora solo ha logrado mantener las conexiones nacionales con Oviedo durante los meses de verano, mientras que Alicante tiene vuelo a Asturias todo el año.

La Consejería de Turismo responde que trabaja para «impulsar las conexiones aéreas, que son fundamentales para el turismo» y sostiene que «el Gobierno regional apostará en 2023 por aumentar las conexiones e incentivar la apertura de nuevas rutas nacionales e internacionales. Queremos potenciarlo, tenemos presupuesto y vamos a hacerlo. En eso estamos ocupados», asegura su titular, Marcos Ortuño.

Reprocha al Ministerio que no haya concedido la declaración de Obligación de Servicio Público (OSP) de la ruta con Madrid, otorgada a otras ciudades.

El consejero sostiene que «el Instituto de Turismo (Itrem) multiplicará por diez este año los fondos previstos para este fin y aportará cuatro millones de euros. Ya se está trabajando en ello y pronto tendremos novedades».

Valora especialmente que en los últimos meses «el aeropuerto ha sido capaz de recuperar un 83,5% de los vuelos anteriores a la pandemia y casi el 77% de los pasajeros», mientras que destaca como «un indicador muy positivo» el crecimiento de los pasajeros españoles, que ha permitido duplicar la cifra de 2019.

El responsable de Turismo recuerda que este verano hubo vuelos a 22 destinos y más de 150 operaciones semanales, después de dos años de restricciones. «La pandemia fue especialmente dura para el sector turístico y esto se refleja en la actividad de los aeropuertos del país, que no han podido recuperar las cifras anteriores a la crisis sanitaria, pero muestran avances significativos», señala.