Más de diez agentes del cuerpo de la Policía Local de Cartagena no han podido incorporarse esta mañana a su puesto de trabajo. Los policías de menos de 55 años recibieron ayer en el pabellón Cabezo Beaza la primera dosis de AstraZeneca, provocando que una veintena de efectivos se encuentren indispuestos.

Finalmente, tan solo diez de los agentes han faltado al turno por fiebre, malestar, dolor muscular y síntomas gripales. El resto, han acudido a su puesto de trabajo aunque afirman no encontrarse en condiciones óptimas para desempeñar sus labores, pero temían dejar a Cartagena sin efectivos esta mañana.

Los agentes apuntan que “esto pasa por vacunar a todos el mismo día” y aseguran que la vacunación debería haberse repartido en varias jornadas y teniendo en cuenta los turnos de los policías precisamente, para evitar que se diera una situación similar.