Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) pidió hoy al comité ejecutivo del sindicato de controladores USCA que se reúna "lo antes posible" para retirar la amenaza de huelga y así retomar "de manera inmediata" las negociaciones, señaló el ente público en un comunicado.
La reunión del comité ejecutivo, prevista para este jueves, será la que decidirá si se convoca o no la huelga en función del estado de las negociaciones, mientras que AENA exige a los controladores la renuncia a la protesta como requisito previo para volver a la mesa de diálogo.
AENA lamenta que el sindicato no haya convocado al comité ejecutivo de urgencia, porque eso supondrá que la reanudación de las conversaciones tenga que retrasarse varios días.
Los controladores reiteraron este lunes su oferta de diálogo con AENA y solicitaron que se produzca bajo un mínimo de condiciones dignas para seguir negociando.
El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), Daniel Zamit destacó: "Queremos una solución", y añadió que, si se les ofrece un convenio semejante al alemán, francés o portugués, "firmamos ahora mismo".
Respecto a la huelga, Zamit señaló: "Hemos dicho muchas veces que mientras estemos negociando no hay ninguna posibilidad de que convoquemos una huelga", porque lo que quieren es "acabar cuanto antes con este conflicto y tener un nuevo convenio colectivo", porque, dijo, "estamos cansados".
Zamit confirmó que el próximo jueves el comité ejecutivo de USCA analizará la negociación con AENA y si se va a convocar huelga y cuándo.
En caso de que los controladores aéreos decidan presentar ese mismo día ante la autoridad laboral el preaviso de huelga, esta no se podría celebrar hasta el domingo 22 de agosto.
Desde AENA se les ha respondido que los acuerdos alcanzados hasta ahora, que afectan a la acción social, la regularización de los trabajadores mayores de 57 años, la formación, las cargas de trabajo y las configuraciones de referencia ya están recogidos por escrito en las actas de las reuniones.
Sin embargo, añade, todavía existen discrepancias en lo que afecta a la jornada laboral y las retribuciones, por lo que, según AENA, estos asuntos deberían someterse a un arbitraje independiente.
