El Centro Párraga de la Región de Murcia inició la programación del tercer trimestre de la Sala de Máquinas con el ciclo ‘Jóvenes Comisarios’, que se inauguró el pasado jueves, con la exposición ‘El ojo salvaje’, una videocreación de Paco Nicolás cuyo comisario es José Javier Aliaga.

La directora general del Instituto de las Industrias Culturales y las Artes de la Región (ICA), Marta López-Briones, aseguró que esta iniciativa pretende «facilitar a los jóvenes comisarios el desarrollo de un proyecto en un espacio profesional». Y añadió, «queremos dar más oportunidades al talento joven cultural para que desarrollen sus ideas en comisariado y den a conocer la obra de los artistas que ellos seleccionen».

López-Briones resaltó que el objetivo de esta convocatoria, que en esta edición ha seleccionado el trabajo de tres jóvenes comisarios, «es apoyar el arte contemporáneo e impulsar la actividad artística de los jóvenes de la Región que han decidido profesionalizarse en el comisariado de exposiciones y en la creación emergente». Junto a Aliaga, los jóvenes comisarios que continuarán con la programación expositiva de este espacio son Grecia Martínez, con Noisiv, y Daniel Soriano, que dirigirá la exposición Des-Educación Utópica.

La exposición

El ojo salvaje se articula en torno a una videoinstalación y se centra en el descubrimiento, la reapropiación y la exhibición de un proceso de enfermedad y muerte real en un intento de invasión y conquista de la intimidad ajena.

El discurso del artista Paco Nicolás parte de la apropiación de un material que fue filmado hace 25 años por un videoaficionado conocido como ‘Rate’, de Orihuela, que tras comprar su primera videocámara, comenzó a registrar su entorno más inmediato y a registrar las imágenes más crudas de su contexto doméstico.

Con el paso del tiempo, su acercamiento a la realidad a través de la lente se fue haciendo cada vez más errático. Su mirada no conseguía descubrir algo distinto e inquietante en la cotidianidad y, sin previo aviso, dejó de filmar.

Cuando su hermana fue diagnosticada de cáncer, Rate encontró un nuevo espacio y una nueva forma de narración en un cuerpo enfermo que se hallaba en las vísperas de su muerte. Fue entonces cuando Rate retomó su película.

El título que da nombre a la instalación hace referencia al ‘ojo salvaje’ de Rate, que es el encargado de captar la realidad de la forma más objetiva posible. La instalación está pensada y diseñada para ser vista con el medio que originariamente habría permitido la reproducción de dicho material fílmico.