El estreno presidiendo el acto institucional del Día de la Región del máximo mandatario de la Comunidad, Alberto Garre, no pudo ser más plácido, ya que lo hizo en el Teatro Capitol de Cieza, ante un público que no paró de aplaudir su intervención. En su discurso , el sucesor de Ramón Luis Valcárcel, quien se había encargado de ese menester durante 19 años, hizo referencia a temas de actualidad. No quiso dejar pasar el anuncio de abdicación de don Juan Carlos, de quien afirmó que «ha dignificado el sistema de la Monarquía Parlamentaria, convirtiendo a la Corona en un referente de entendimiento de los españoles, de impulso y progreso para nuestra nación».

Sobre la intención de comunidades, como Cataluña, de conseguir la independencia de España, aseguró que «las aspiraciones secesionistas, vengan de donde vengan, suponen una lacra social».

A su juicio, «es preciso que exista una mayor coordinación entre las regiones, con una visión global de Estado y una lealtad que no busque incidir en la diferencia, en la exclusión, sino por el contrario tener las ideas claras y considerar las aspiraciones secesionistas, vengan de donde vengan, como una lacra social española». También advirtió de que espera que la reforma constitucional no se convierta en «una sucursal de los estatutos de autonomía».

Garre recalcó que defenderá el principio de solidaridad entre todas las comunidades autónomas y el de unidad de España, y estimó necesario adaptar la Constitución, pero «sin excluirla, para mejorarla y consolidarla».

Además, consideró que con esa reforma constitucional hay que evitar «que las Cortes se conviertan en el sastre que ajuste los patrones diseñados por los parlamentos autonómicos, y el Tribunal Constitucional en la lavandería de las extravagancias competenciales estatutarias».

Para el presidente regional, la base de la Constitución está asentada en la estructura territorial autonómica del Estado, «cuya negación nos llevaría a dudar del propio edificio constitucional, capaz de superar ideologías e inventos separatistas desde el convencimiento de la pluralidad de los diferentes caracteres autonómicos que conforman el Estado español incluyente».

Agregó en su discurso que hay que adecuar las estructuras autonómicas a la realidad actual, «rendir cuentas ante el Estado y cumplir con la doble premisa, legal y de sentido común, de acatar las leyes y no gastar lo que no se tiene, como estamos haciendo».

Volviendo a los futuros cambios de la Corona española destaca que «el Príncipe Felipe encarna la imagen de una monarquía actual, moderna, cuyo compromiso con los españoles será, a buen seguro, eficaz garante de nuestro progreso y nuestro entendimiento en los próximos años», por lo que le considera más que adecuado para suplir a su padre al frente del estado español.

Garre concluyó su discurso afirmando que «no admitir la crisis aún presente sería de auténticos cándidos, no cometamos el error de negarla como ocurrió hace unos años». En la misma línea, remarcó que «mientras exista un ciudadano en paro, el Gobierno que presido no lo olvidará, pero sería de ingenuos negar la recuperación actual que aspiramos a cimentar, intensificar y prolongar».

En el acto se hizo entrega de la Medalla de Oro de la Región de Murcia, entre otras personalidades e instituciones, al colegio de Abogados de Murcia, cuyo premio recibió su decano, Francisco Martínez Escribano. Garre quiso recordar su profesión de abogado y puso la nota emotiva recordando a Escribano «el entrañable recuerdo de tu padre, que también fue mi decano, enhorabuena Paco», le dijo.

Garre se refirió también a otro de los reconocidos con la Medalla de Oro de la Región de Murcia, el jugador de ElPozo Fútbol Sala Kike Boned, valenciano pero afincado desde hace 13 años en la Región, a quien calificó como referente en el deporte regional y de quien dijo que «se ha convertido, por méritos propios, en un murciano más». Para terminar felicitando a todos los murcianos en un día tan especial, «desde tierras cercanas a la antigua Medina Siyâsa -en referencia a Cieza-, donde se celebró el acto».