El conductor de un Ford Ka blanco empotró su coche la madrugada del viernes sobre las 1.00 horas en un semáforo de la calle Reina Victoria de Cartagena a la altura del cruce con Ángel Bruna.

El accidentado iba camino de comprar una hamburguesa en Mandarache. El utilitario en el que viajaba solo este varón de 35 años impactó frontalmente con la señal de tráfico, provocando que ésta se quedara completamente torcida.

El piloto, de 35 años, tuvo que ser trasladado en ambulancia con varios golpes y aturdido hasta Urgencias del hospital Santa Lucía. Según relató ayer a este periódico la víctima «he vuelto a nacer». Además, el propio conductor afirmó que «me he despitado porque me ha sonado el móvil y por eso me he chocado». Este varón relató que «ni siquiera llegue a tocar el teléfono, sólo giré la cabeza y sin darme cuenta ya había impactado con el semáforo». Como consecuencia de este golpe ha sufrido una fractura en su mano izquierda, aunque ayer ya pasó el día en su domicilio y fuera de peligro.

Únicamente hubo un coche implicado en el accidente, que quedó con todo el capó hundido. Del vehículo saliío una gran cantidad de humo, por lo que la Policía Local de Cartagena tuvo que delimitar un perímetro de seguridad. El conductor concluyó que «ya voy a llevar siempre el móvil en silencio con el ´modo avión´».