La plantilla de Navantia ve con buenos que Defensa intente vender el submarino ´Siroco´ de la serie 70, para evitarse el coste de una gran carena –reparación y sustitución de los equipos– y financiar la construcción de los nuevos S-80. «Con esta operación se garantiza la carga de trabajo de los astilleros. Más vale tener tres submarinos operativos que cuatro inutilizados», señaló ayer el presidente del comité de empresa de Navantia, Ignacio Briones.

Asimismo, aseguró que el plan de Defensa de vender el citado buque a un país asiático –que se hizo público el martes en El País– no es una novedad para los trabajadores de los astilleros. «Antes del verano, el presidente de la compañía, Aurelio Martínez, nos comentó de pasada que, dentro del capítulo de comercio exterior con la Armada, iba a celebrarse reuniones con un país asiático para vender uno de los cuatro submarinos de la serie S-70».

En opinión del representante de los trabajadores de los astilleros, «la venta del sumergible es ideal porque las grandes carenas hay que seguir haciéndolas y, en estos momentos, Navantia es el único astillero del mundo que puede reparar los sumergibles de la serie 70. Estos buques se construyeron bajo patente francesa y, tanto si se vende como si no, teóricamente la carga de trabajo sería para nosotros».

En este sentido, el presidente del comité de empresa de Navantia recordó que los submarinos requieren de un mantenimiento anual y otro cuatrianual o gran carena y añadió: «Francia ya no hace estos trabajos y de ellos nos mandaron un submarino de Pakistán para que lo hiciéramos aquí».

Industrias auxiliares

Aunque el S-72 ´Siroco´ es uno de los cuatro sumergibles del arma submarina española, «la Armada ya piensa en la serie 80», dijo Briones, quien insistió en que «lo que sí es importante es amarrar que las grandes carenas se hagan aquí en Cartagena, no sólo por la repercusión que tiene para la plantilla de los astilleros, sino por el beneficio que este trabajo supone para las industrias auxiliares de la comarca».

De este modo, subrayó que si finalmente el ´Siroco´ se vendiera a Tailandia o a Pakistán, «no sería lo mismo que la gran carena se hiciera en estos países, aunque fuera con personal de Navantia, a que se haga en Cartagena. A diario cruzan la puerta de los astilleros entre ochocientos y mil trabajadores de empresas auxiliares, de los que 300 trabajan en la gran carena», argumentó.

Mientras la alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, piensa pedir explicaciones en el Congreso sobre los planes del Ministerio, la diputada socialista en las Cortes, Sara García, aseguró ayer que la construcción de los S-80 «está garantizada con fondos del ministerio de Industria y que, en caso de venderse el ´Siroco´, el dinero se destinaría a otras inversiones». Por su parte, el ministerio de Carmen Chacón sigue sin desmentir ni confirmar esta noticia que, por otra parte, lleva varios meses escuchándose en el ámbito parlamentario y también en los propios astilleros de Cartagena.