Judicial

Condenan a 17 meses de internamiento al menor que mató a Kevin en Jumilla

'El Balilla', detenido en 2021 junto a su hermano mayor y sus padres, admitió su participación en el homicidio y alegó que está reinsertado: tiene un contrato de trabajo y ha sido padre recientemente

Globos, fuego e indignación en la concentración por el joven Kevin en Jumilla horas después de su asesinato en 2021.

Globos, fuego e indignación en la concentración por el joven Kevin en Jumilla horas después de su asesinato en 2021. / ISRAEL SÁNCHEZ

Ana Lucas

Ana Lucas

‘El Balilla’, el menor de edad detenido en mayo de 2021, junto a su hermano mayor y sus padres, por su implicación en la muerte violenta del joven Kevin, en Jumilla, ha sido condenado a 17 meses de internamiento en un centro tras admitir su participación en la riña que acabó en muerte.

Aunque inicialmente la Fiscalía pedía para el adolescente una pena de siete años de internamiento cerrado, finalmente el chico, ya mayor de edad, ha alcanzado un acuerdo con el Ministerio Público que se saldó con esta rebaja. El joven, además de reconocerse autor del delito de homicidio que se le imputaba (cabe recordar que el reconocimiento de hechos funciona como atenuante a la hora de dictar condena), argumentó que, casi tres años después de aquel crimen, su vida es completamente distinta: tiene un contrato de trabajo y ha sido padre de un niño. ‘El Balilla’ continúa en libertad: aún no ha ingresado en el centro.

Inocente, presunto autor material, y sus padres serán juzgados por el procedimiento del tribunal del jurado

Los abogados de Marta, la novia del joven al que mataron aquella noche, han presentado ante la Audiencia Provincial de Murcia un recurso contra esta resolución judicial, ya que consideran que se trata de una condena muy inferior a la que el chico (que tenía 17 años cuando se produjo el homicidio, por lo que se le juzga como si fuese menor aún) tendría que cumplir. Se espera que el tribunal se pronuncie sobre el recurso (desestimándolo o aceptándolo) en semanas, aunque podría llegar a tardar meses. 

El resto, a la espera de juicio

Aquella madrugada de 2021, apenas después de que el joven Kevin fuese dado por muerto en el hospital, al no poder sobreponerse a la gravedad de las cuchilladas recibidas en la pelea en la que se vio envuelto, la Policía Judicial de la Guardia Civil llevaba a cabo cuatro detenciones: la de un chico, de nombre Inocente (alias Tente), y las de tres de sus familiares, en concreto sus padres y su hermano pequeño, que es el joven ahora condenado. El Instituto Armado tenía indicios de la participación de todos ellos en el episodio que acabó en crimen.

Concentración por Kevin horas después de su asesinato.

Concentración por Kevin horas después de su asesinato. / Israel Sánchez

‘Tente’ (presuntamente, el autor material de las puñaladas que mataron a Kevin) y sus progenitores serán juzgados como mayores de edad en un procedimiento para el que falta fijar la fecha. Será un jurado popular el que decida el destino de estas personas.  

La noche del crimen

El de Kevin fue el segundo crimen de 2021 en la Región, tras el de El Palmar: un hombre mataba a su socio de un tiro en la cabeza y luego se quitaba él la vida del mismo modo en una casa de La Manga.

Ocurría pasadas las dos de la madrugada en la calle Miguel de Unamuno de Jumilla. Testigos avisaron a Emergencias de que se estaba produciendo una reyerta, en la cual había gente sangrando y gritando. En la pelea había varias personas involucradas. Al lugar se movilizaron agentes de la Policía Local de Jumilla y tres ambulancias. Los municipales y los sanitarios, al llegar al lugar de los hechos, se encontraron a una mujer sangrando por la cabeza y a otro sujeto con un palo en la mano, aunque el peor pronóstico era el de Kevin, que estaba tirado en el suelo con dos heridas de arma blanca en el estómago.

Cuartel de Jumilla; en la foto pequeña, Kevin, el chico asesinado.

Cuartel de Jumilla; en la foto pequeña, Kevin, el chico asesinado. / L.O.

Por este homicidio llegaron a estar investigados miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que quedaron exculpados al no considerar la Justicia que actuasen mal.