Investigan si el asesinato del vecino de Monteagudo fue un ajuste de cuentas

La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga si el asesinato de Lorenzo A.M., el hombre hallado muerto el viernes por la noche en su casa de Monteagudo, en Murcia, fue un ajuste de cuentas, indican fuentes cercanas al caso.

Investigadores del Instituto Armado se personaban este sábado por la mañana, día después del crimen, al bajo ubicado en el carril de la Portada donde mataron a Lorenzo, de 62 años de edad. El cadáver del vecino fue levantado pasadas las dos de la mañana, después de que la autoridad judicial lo autorizase.

En la misma puerta de la vivienda, y en las inmediaciones de la misma, los especialistas de la Científica hallaron manchas de sangre, por lo que recogieron estos vestigios, cuyo posterior análisis determinará si el reguero pertenece solo a la víctima o también hay ADN de otra persona.

Seguir este rastro de sangre también sirve a los investigadores para establecer por dónde huyó el asesino (o asesinos) después de degollar al sexagenario, cuyo cuerpo apareció en el salón de la vivienda. Según los amigos que entraron a ver qué pasaba (tras descubrir la sangre en el exterior), estaba frío. Será la autopsia la que establezca a qué hora mataron a Lorenzo.

"Abre la caja fuerte"

Residentes en la zona contaban este sábado a los investigadores que al domicilio del finado acudía «gente muy rara» y que el viernes en cuestión, día del asesinato, hubo mucho trasiego de personas, especialmente por la tarde, después de comer. Oyeron discusiones que iban subiendo de tono. Otros vecinos aseguraron que habían escuchado cómo alguien amenazaba de muerte a Lorenzo «si no abría la caja fuerte».

La Policía Judicial no descarta que un asunto de drogas esté tras el crimen: la víctima tenía vínculos con el trapicheo

El asesinado es un viejo conocido de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad: según fuentes próximas a la investigación, habría tenido vinculación con el tráfico de drogas. Al ver los antecedentes del hombre, la Policía Judicial no descarta que los trapicheos con estupefacientes hayan tenido algo que ver con el asesinato.

La última detención que le consta a Lorenzo A.M. (del que este sábado se despedían en redes sociales sus allegados con un «adiós, amigo, siempre te tendré en mis recuerdos») es del año pasado. 

Cuando se descubrió el cadáver, los allegados del hombre ya contaron que tenía que conocer a su asesino, ya que la entrada a la casa no estaba forzada. Afirman que nadie más tenía llave, por lo que sospechan que el vecino habría abierto la puerta a alguien que le daba confianza.

Los profesionales de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad continúan recabando pistas y tomando declaración a vecinos, a fin de estrechar el cerco y poder identificar, localizar y detener en breve al responsable del crimen.