Lo secuestran, lo desnudan, le tiran agua hirviendo e intentan cortarle el pene en Cartagena

Dos individuos que secuestraron a un hombre, lo desnudaron, le tiraron agua hirviendo encima e intentaron cortarle el pene admitieron lo que hicieron ante la Sección Quinta de la Audiencia Provincial, con sede en en Cartagena.

Uno de los delincuentes tiene 22 años; el otro, 19. El secuestro tuvo lugar en marzo de 2022, cuando encontraron al perjudicado, de 51 años, por la calle. Lo estaban buscando a fin de localizar a su hermano, que, al parecer, tenía una deuda con ambos sujetos. Los dos hombres engañaron a su víctima para que los acompañase hasta un inmueble. Ahí empezó la tortura.

Tal y como se lee en el relato de hechos probados de la sentencia, "los acusados obligaron a su víctima a sentarse en un sofá, le cogieron la mano derecha, la colocaron sobre la mesa y presionaron su dedo meñique con un cuchillo, exigiéndole que les dijera dónde estaba su hermano y afirmando que iban a cortarle el dedo". Llegaron a hacerle un corte superficial en la falange. A continuación, comenzaron a propinarle puñetazos en la cara y le obligaron a desnudarse.

Una bolsa en la cabeza

El calvario continuó: "Le quitaron la cartera y su teléfono móvil y, utilizando una cadena metálica y un candado, le ataron ambas manos a una escalera. Le metieron un trapo en la boca y lo amordazaron con una camiseta. Posteriormente le colocaron una bolsa de basura en la cabeza. Los acusados tiraron agua hirviendo sobre el cuerpo de su víctima, sobre las piernas, la cadera y el costado y le dijeron que iban a cortarle el pene". Uno de ellos cogió el cuchillo y lo aproximó a los genitales de la víctima, causándole un pequeño corte. Posteriormente, los dos sujetos abandonaron el inmueble, cerrándolo con llave y diciéndole al hombre que iban a buscar a su hermano.

El hombre, pese a las heridas, consiguió soltar su mano izquierda y, posteriormente, se desató, se quitó la bolsa de basura de la cabeza y subió hasta el tejado de la vivienda. "Completamente desnudo y aterrorizado, se lanzó desde el tejado del inmueble a la vía pública y se escondió detrás de unos coches hasta que sobre las cuatro de la tarde llegó la Policía Nacional", prosigue la resolución judicial.

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El hombre pasó doce días ingresado en el hospital. Los sospechosos fueron detenidos días después y del Juzgado de Guardia fueron llevados a prisión provisional. Salieron libres bajo fianza dos meses después. Hasta que salió su juicio, que se resolvió por conformidad.

Los sujetos fueron condenados cada uno de ellos a cinco meses de cárcel por un delito contra la integridad moral; a un año y once meses por un delito de lesiones agravado, y a dos años más por un delito de detención ilegal. Ninguno de los dos podrá aproximarse durante tres años a menos de 300 metros de su víctima, a la que tendrán que indemnizar con 14.590 euros.

A la cárcel

Los abogados de la defensa de los dos delincuentes pusieron un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) para pedir que se suspendiese la pena privativa de libertad para ambos. El TSJ al desestimar su recurso, apunta que "ninguna de las circunstancias personales alegadas por los condenados en la instancia (origen humilde, corta edad, pago de parte de la responsabilidad civil, arrepentimiento o asunción de su responsabilidad penal por la vía de la conformidad), puestas en relación con la naturaleza, extraordinaria gravedad y brutalidad de los hechos por los que se condena, alcanza entidad bastante como para excepcionar el régimen ordinario de suspensión de penas, que la proscribe cuando la suma de las penas impuestas excede de dos años. Extensión que excede en el caso presente en más del doble (4 años y 4 meses) a aquellos dos años".