Antonio Manuel G. segó a los mandos de su Opel las vidas de una pareja el pasado fin de semana en Canals. De 48 años de edad, trabajaba en una conocida fábrica de Xàtiva. De hecho, tenia que entrar en el turno del domingo que empezaba a las 10 de la noche. Las fuentes consultadas apuntan que actualmente vivía solo en un chalet ubicado en la carretera de Llocnou, tras haber comenzado un proceso de separación con su mujer. Al parecer, se le conocen bastantes apodos. "El manchego" y "el legionario" son dos de ellos. Entre sus compañeros de profesión la noticia circuló como la pólvora. Muchos no se creían lo que había ocurrido.
Fuentes de la Policía Local de Canals explicaron este lunes que en sus archivos no han hallado otros episodios protagonizados por el detenido.
Sin embargo, el domingo atropelló mortalmente a dos personas. En un vídeo difundido por whatsapp se le ve en el suelo con las esposas mientras se dirige a la Guardia Civil y señala con la cabeza a uno de los conocidos de las víctimas: "Que quede constancia, míralo, este, este es uno de ellos, mira la boca como me la ha hecho. Me ha hecho perder la cabeza", grita de forma algo ininteligible.
