Estuve en el Casino de El Palmar para oír a mi amigo Gabriel Batán Saura (más conocido en su pedanía como El Tati) en una tertulia con sus vecinos. Gabriel habló en su conferencia de su familia y sus amigos, y los insertó en su infancia y edad de colegio y juventud. También explicó sus distintos trabajos
«La tertulia de La Asomada, de El Palmar, encuentros con uno de los nuestros» es el título de las conferencias-tertulias semanales en la pedanía murciana, que graba en vídeo su presidente, el de La Asomada, Enrique López Luján, y modera Juan Alarcón. Son reuniones semanales, los miércoles por la tarde en el Casino del Palmar, durante hora y media.
La Asomada es una asociación que recoge a un buen número de socios y amigos que aparte de los actos programados desarrolla otras actividades. Este es el caso de la última, a la que asistí, la conferencia de Gabriel Batán, que fue muy interesante, ya que habló de su familia y amigos, su época infantil y juvenil, sus diversos trabajos, la familia que creó con su mujer, Encarna, y sus tres hijos, los juegos, la huerta, el cine Bernal… y tantos y tantos recuerdos que le venían a su memoria y tuvo que ampliar en sus respuestas a preguntas del público. Y todo ello contado entre anécdotas relaccionadas con lugares de la proponen los socios o grupos que se suman y vienen de otras pedanías. Es el caso de la exposición Grupo Arrixacarte, Mar Menor, ubicada en dos salones del Casino, compuesta de cuadros y conjuntos plásticos que se montaron pensando en y sobre el Mar Menor por artistas que trabajan como sanitarios en la Arrixaca. El salón estaba lleno de amigas y amigos y trabajadores de todo tipo, interesados por el Mar Menor y la situación en que se encuentra.
El éxito de la exposición está garantizado por su alto sentido didáctico y también por su belleza plástica. La creatividad y digitalización están conseguidas, encabezadas por el caballito de mar de la comisaria y de la exposición y presidenta del grupo de Treinta Artistas, Encarna Pastor. Y se logra el efecto requerido, que es el peligro de que nuestra laguna salada ahora esté aún más terriblemente amenazada. Arrixacarte motiva por su plasticidad, por su medida animación telúrica, por su finura marina, por su variedad de personajes marinos y personas, niños, bañistas, jóvenes, olas suaves, niños asombrados, veleros colistas, fotografías, por aquel grupo de socorro, que es en nuestro caso un pez que no puede respirar, un socorro de luz , de arte para la esperanza, de SOS, en busca de una nueva esperanza surgida del corazón, un grito marino en el Círculo Cultural de ese Casino con treinta artistas que han venido a protestar con nosotros.
Salvemos el mar Menos entre todos. Cultura y arte para volver a nuestro pequeño gran mar antes de que se apague su luz propia, sus aguas queridas, su sal verdadera y su proyección pescadora. Vayamos en esa vela de El Palmar, todos juntos, con nuestro mar propio y por la cultura, la que nos ofrece la Arrixaca y El Palmar.
Y ello, mientras la guitarra de Paco de Lucía nos enseña, en aquel salón rojo donde el arte se levanta en protesta del dolor del Mar Menor. Y ‘entre dos aguas.
