Kurtura profesioná

¿Respuestas de alumnos de primaria en exámenes de cualquier colegio? No, en absoluto. Son respuestas de una buena parte de sus maestros interinos, en los últimos exámenes para oposiciones celebrados en Madrid. Éste es el nivelÉ ¿Que si son solo unos pocosÉ los pocos de siempre? No. Rotundamente, no. Son la inmensa mayoría. Miren: el 86% de los 14.110 aspirantes suspendieron en las llamadas pruebas de conocimiento que incluyen preguntas de nivel para niños de 12 años. Son cifras oficiales, no inventadas. El 93% no supo trasladar el equivalente de dos kilogramos y y treinta gramos a gramos. Ni lo mismo en metros. Ni igual en litros. Ni tampoco en horas o minutos. CeroÉ Por qué provincias pasan el Ebro, Duero y Guadalquivir, tan solo el 2% de aspirantes supo contestarlo. El 98%, ni olerloÉ Ojo al dato, son ídem del ministerio. De más de 14.000 aspirantes, no llegaron a 2.000 los que pasaron tan 'altísimas' pruebas.

Esto es demoledor. Tremendamente patético. Y triste, muy triste. Ni yo mismo, que ya es decir, me atrevo a evaluar tamaño disparate. Pero he visto cosas en la experiencia con mis nietos que no me extraña un jodido ápice que esté pasando esto. En absoluto. Los sindicatos dicen que difundir esta información es "someter a escarnio público y hacer guerra sucia a los docentes" y añaden: "No justificamos las faltas ortográficas en un maestro, pero hay conocimientos que adquirieron en secundaria y que el docente no vuelve a ver hasta la carrera de Magisterio, por lo que pueden olvidar, como cualquier titulado, el recorrido de un rioÉ". Espeluznante. O sea, un maestro, cuya profesión es la enseñanza, puede olvidar la materia que debe enseñar. No pasa nada. Y no saber restar, ni escribir, ni las más elementales nociones de geografía, ni las más básicas ciencias.. ¿para qué?.. Pero eso sí, ser maestro de escuela. Burros guiados por burros, defendidos por burros, encargados de desasnarÉ

Desde Educación se argumenta ante este escándalo que "ningún docente [no hablamos de decentes], ni como titular ni como interino, que no esté al día en los conocimientos mínimos de un alumno de primaria, debe dar clase"É ¡Pues qué alivio! Maestros a los que solo se les exige actualizar sus conocimientos a nivel de primariaÉ Es como si se le da el título de médico al que sabe poner un esparadrapo. Exactamente lo mismo. Óigame, señor, a ver: ¿cuatro por cinco? ¡Vainte! AprobaoÉ ¡Hala, a dar claseÉ! Cuando, en realidad, para un título de profesor, deberían de exigir un MIR, como se hace en Medicina. Es casi que más necesario, si me apura, mire ustedÉ Porque tener médicos que no saben escribir bien, ni realizar los más mínimos cálculos, es tan suicida como no saber anatomíaÉ

De verdadÉ quisiera que esto solo fuera un mal sueño. Que lo que descubrió El País con pelos y señales, con datos y documentos, con pruebas fehacientes, hubiese sido un 28 de diciembre. No sé qué daría por que fuese un lamentable error, una equivocación, no séÉ Juro por todo el Olimpo al completo que nada en el mundo me gustaría tanto como que así no fuera, peroÉ

Me consta que hay buenos profesionales. Y muy dignos. Es cierto. Pero no es menos cierto que cada vez hay más de estos otros, de los mediocres, de los cazapanes, de los inútiles, de los incultos, de los iletrados, de los ignorantesÉ El informe Pisa no deja lugar a ninguna duda. No se puede transmitir el nivel del que se carece. El resultado es el que cada año nos restriega ese informe por la cara a mayor vergüenza nuestra. Y defender ese estado de cosas, el querer justificar, en vez de denunciar, tamaña ignominia, por un falso corporativismo o un iresponsable politicismo, es amar muy poco la profesión que se ha elegido para vivir de ellaÉ Salvo que solo sea por este último, único y exclusivo motivoÉ Que sea una salida. No una vocación. Que salir, se sale hasta por una gateraÉ Total, pá lo que sirve, joelÉ