'Pasapalabra' llegó a su fin con una tarde marcada por la tensión, la emoción y sobre todo un desenlace completamente inesperado para la audiencia: el programa comenzó cargado de emociones y expectativas a causa de los giros inesperados y los momentos de suspense en los que daba la sensación de que todo podía cambiar de forma radical. Una vez más, la atención se centró completamente en el trabajo de Óscar y Moisés, que un día más se medían por llevarse el bote acumulado de casi 1,5 millones.
En esta ocasión, Óscar se enfrentó con una impresionante marca de 100 programas a sus espaldas al mayor desafío del juego, el de responder correctamente las 25 definiciones que componen el 'Rosco' de 'Pasapalabra'. Más allá de la soltura y la destreza que maneja habitualmente, en esta ocasión óscar no consiguió dominar la última ronda, llevando la tensión hasta el punto de saber que tanto él como Moisés podían ser eliminados en cualquier moemento del programa y después de haber pasado 100 roscos juntos.
Cuando Óscar, conocido por su agilidad y habilidad para responder a las deficiniones del Rosco se detuvo en seco fue cuando se hizo el silencio en todo el plató: el madrileño optó por no jugársela a cometer un error que podría costarle su futuro en el programa. Los espectadores, que bajo ningún concepto se esperaban esta respuesta, se quedaron completamente mudos.
La pelota pasó al tejado de Moisés, que experimentó en el juego ante la misma presión de verse obligado a decidir para continuar con su futuro en el programa. Ambos lucharon para asegurarse un lugar en el próximo programa y evitar la temida Silla Azul, que les acercaría un paso más hacia la eliminación.
El momento más inesperado de 'Pasapalabra'
El punto álgido de la noche llegó cuando, en un giro totalmente inesperado, Moisés decidió no intentar resolver las palabras que le quedaban y asegurarse el empate con Óscar. Esta inusual decisión dejó a la audiencia sin palabras y al borde del asiento, esperando la próxima ronda para ver cómo termina de una vez por todas esta batalla infinita entre Óscar y Moisés.
Aambos se llevaron respectivamente a casa un premio de 1200 euros y se aseguraron la continuidad para el próximo día, a pesar de esto, el gran tbote del programa, que ya supera el millón y medio de euros sigue siendo el objetivo principal de ambos aspirantes.
