Tradición

La ciudad de Murcia despide a su patrona con flores y emoción hasta el 5 de septiembre: "Guapa, guapa y guapa"

La Virgen de la Fuensanta regresaba a su santuario del monte en una romería menos concurrida que la del noveno mes, pero igual de emotiva para los devotos

Ana Lucas

Ana Lucas

Una señora mayor se secaba las lágrimas, a solas en su balcón, al paso de la Virgen de la Fuensanta, la patrona de Murcia, que era llevada este martes en romería desde la Catedral a su morada habitual, su santuario del monte en Algezares.

Baja un jueves, sube un martes. La Morenica, como estaba previsto, regresaba este día 16 de abril a su ‘casa’ tras pasar las Fiestas de Primavera en la ciudad, en concreto en el templo principal de Belluga. Templo en el cual su fachada principal continúa en obras, lo que obligó a los fieles a sacar la imagen por la puerta que da a la Plaza de la Cruz. Al son del himno nacional y con multitud de personas alzando sus manos, móvil entre ellas, para grabar el instante. "Así la vemos las que no podemos ir, está guapísima", comenta una vecina que recibe el vídeo de una amiga, vídeo que captó una de las petaladas.

A su paso, algunos adultos, como suele pasar, alzaban ante la talla a niños pequeños.

A su paso, algunos adultos, como suele pasar, alzaban ante la talla a niños pequeños. / Israel Sánchez

Gritos de "viva la Virgen de la Fuensanta", "viva la Morenica" y el tradicional "guapa, guapa y guapa". La patrona era este tercer martes de mes la protagonista de la denominada romería de subida, que no es tan multitudinaria como la que se hace en septiembre, pero igualmente relevante para quienes, como esa vecina en su balcón, se emocionan al paso de la querida imagen. Y para quienes la rocían con pétalos de flores, como símbolo del amor que les inspira y les hace inspirar.

Tras la santa eucaristía, a las siete de la mañana en el templo de Belluga (a la que asistieron el presidente de la Región, Fernando López Miras, y el vicepresidente, José Ángel Antelo), la imagen fue sacada de la Catedral y emprendía, acompañada de los romeros, su camino hasta Algezares.

A su paso, algunos adultos, como suele pasar, alzaban ante la talla a niños pequeños. Para que la Madre de Dios les guarde y proteja. La Unidad de Caballería de la Policía Local de Murcia escoltó a la patrona hasta el santuario.

La Virgen estará en el monte hasta el 5 de septiembre, cuando será bajada de nuevo a la Catedral, con motivo de la Feria de Septiembre. Cuando la ciudad vuelva a estallar en fiestas, el Malecón se convierta en los Huertos y los Moros y Cristianos batallen en vistosa contienda. Faltan cinco meses.