Un año sin atención sanitaria en el consultorio de Campo López

Desde que el 13 de junio de 2022 comenzó la remodelación de un tramo de cuatro kilómetros de la carretera de ‘El Mesillo’, los sanitarios no han vuelto a esta pedanía lorquina

Vista de la pedanía lorquina de Campo López.

Vista de la pedanía lorquina de Campo López. / MARÍA MIÑARRO REIXACH

Lo que iba a ser el cierre temporal del consultorio médico de la pedanía lorquina de Campo López durante los ocho meses que estaba previsto que durara el arreglo de un tramo de cuatro kilómetros –entre los puntos 8 y 12– de la carretera RM D8, conocida como la de ‘El Mesillo’, se ha convertido en la clausura de este establecimiento sanitario que supera ya el año.

Desde el 13 de junio de 2022, las 18 almas que habitan esta bucólica localidad –12 mujeres y seis hombres– con una media de edad que supera los 60 años y sus consecuentes limitaciones de movilidad, se ven obligadas a desplazarse hasta el consultorio médico de Aguaderas. Un centro situado a 7 kilómetros en condiciones normales, pero al que ahora se tiene que acceder por el desvío provisional habilitado por la Consejería de Fomento del Gobierno regional a través de  la carretera RM-D9, para después continuar por la carretera RM-332 hasta la RM-11 y luego coger la de la Malvaloca. Este periplo aumenta el trayecto en 30 kilómetros.

Desde el inicio de las obras de la vía que une el casco urbano de Lorca con las pedanías Morata y Ramonete, los sanitarios no han vuelto al pueblo. Desde la Consejería de Salud no se ha anunciado el restablecimiento del servicio sanitario ni tampoco se ha dado orden, como pedían los vecinos, para que el médico y la enfermera, que atendían la consulta los miércoles por la mañana, la reabran haciendo uso del desvío alternativo, en vez de obligar a los usuarios a realizar el desplazamiento. Un trayecto que sí recorren trabajadores de Limusa y de otros servicios municipales, o el párroco cuando sube a dar misa.

Para algunos afectados, como Ángeles Reixach, cuya segunda residencia está en Campo López, las molestias derivadas del retraso en la ejecución de las obras de las carreteras se traducen en que ya no puede disfrutar de su casa de campo tanto como le gusta hacer. “Antes subía todos los fines de semana, ahora me resulta imposible porque tardo el doble de tiempo aun subiendo por la rambla y estaba destrozando el coche”, cuenta. Así que se limita a ir “lo justo para regar la macetas y no tener desatendido aquello”.

Pero para Ángeles su caso no es el más grave, y es que no entiende que “no se esté pensando en las necesidades de personas muy mayores, que no conducen y que tienen que movilizar a familiares que se ven obligados a perder días de trabajo para acercarles hasta la consulta más próxima”.

Por ello reclama, en nombre de sus vecinos, que se clarifique el futuro del consultorio y que se haga pública la fecha en la que recuperarán un servicio que consideran esencial. “Creo que lo mínimo que se puede hacer es informar a los vecinos”, apunta. Al respecto, durante la visita de concejales del equipo de Gobierno municipal a las fiestas de Campo López, celebradas en honor de San Pedro el pasado mes de junio, comenta que “nos dijeron que la reapertura de la carretera era inminente, pero todo sigue igual”.