Cofradías

El Paso Blanco entrega este viernes un banderín bordado a la Policía Local de Lorca

En la capilla del Rosario se aceleran los trabajos de restauración del cascarón de la bóveda del retablo mayor

El presidente del Paso Blanco, centro, recibe detalles de los técnicos que trabajan estos días en la bóveda de la capilla del Rosario.

El presidente del Paso Blanco, centro, recibe detalles de los técnicos que trabajan estos días en la bóveda de la capilla del Rosario. / Pilar Wals

El Muy Ilustre Cabildo de Nuestra Señora la Virgen de la Amargura en la Real y Muy Ilustre Orden Archicofradía de Nuestra Señora del Rosario, Paso Blanco, entregará este viernes un banderín bordado a la Policía Local de Lorca como “homenaje y agradecimiento por el trabajo que realiza para velar por el bienestar y la seguridad de todos los lorquinos durante todo el año y, especialmente, en Semana Santa”, afirmaba el presidente de la cofradía, Ramón Mateos.

El acto tendrá lugar a las ocho de la tarde en la capilla del Rosario, donde se bendecirá y entregará el banderín bordado en sedas y oro con el escudo de la Policía Local. Un regalo muy especial, señalaba Mateos, realizado “por las bordadoras blancas en los talleres Virgen de la Amargura, y que “representa el cariño, respeto y admiración que el Paso Blanco siente por los miembros de la Policía Local”, añadía el presidente de la cofradía.

El banderín será entregado por el presidente del Paso Blanco al comisario jefe de la Policía Local, José Antonio Sansegundo, en un acto en el que participará la Agrupación Musical Virgen de la Amargura que realizará un homenaje a los caídos y cerrará el acto interpretando el Himno Nacional.

En la capilla del Rosario se llevan a cabo estos días trabajos para reintegrar las ‘mutilaciones’ de la bóveda. Las actuaciones se centran en la parte original conservada de la pieza que realizó en 1744 José de Ganga Ripoll. Se trata, afirmaba Ramón Mateos quien este martes supervisaba los trabajos, de la “restauración, conservación y puesta en valor del cascarón de la bóveda del retablo mayor”.

El objetivo de estas labores es “reintegrar los elementos desaparecidos, con la finalidad de reponer la lectura prístina del conjunto y encontrar, en la misma simetría de la obra, modelos exactos de las zonas perdidas”, explicaba.

Los trabajos han sido ejecutados por el restaurador Antonio García Rico, el ebanista Manuel Mateo Manzanera y el maestro carpintero Alfonso Salas Alcaraz. Todos ellos, pertenecen a la Concejalía de Desarrollo Local y Empleo. Las labores se están llevando a cabo con ayuda de una grúa que permite a los técnicos llevar hasta lo más alto las piezas para ser ensambladas. Se están utilizando, apuntaban, las mismas colas orgánicas y dorados con pan de oro de ley de 22 quilates bruñidos con ágatas. Las 44 piezas cuentan con anclajes ocultos auto portantes para no interferir en la materialidad de los elementos originales.

Mateos ponía énfasis en que la actuación “respetará al máximo” las pinturas que aparecen en la zona. El proyecto, insistía, concluirá el “coronamiento axial del retablo mayor” más de 80 años después de ser quemado durante la Guerra Civil. “Las llamas no alcanzaron las partes más altas, pero sí ocasionaron daños que se están reparando estos días”.