Fútbol

Las dudas rodean al plan del FC Cartagena para la 24-25

El club albinegro no cuenta con un una hoja de ruta clara para la temporada que viene

Paco Belmonte y Manolo Breis. | IVÁN URQUÍZAR

Paco Belmonte y Manolo Breis. | IVÁN URQUÍZAR

Alfonso Asensio

Alfonso Asensio

Al presente curso de LaLiga Hypermotion le quedan a penas cuatro días y cuanto termine llegará también el final de una temporada histórica para el Fútbol Club Cartagena. Histórica en sentido negativo, con varios de los peores registros del club en todas sus temporadas en Segunda, e histórica también en sentido positivo, con una remontada increíble que propició una salvación impensable. Sin embargo, la dramática situación del equipo ha sumido al entorno albinegro en una frenética actividad deportiva que no le ha permitido mirar más allá de la siguiente semana. Ahora, con el objetivo cumplido, la parroquia albinegra debe pensar en un futuro que está lleno de incertidumbre.

Desde un posible cambio en la propiedad hasta la confección de la plantilla, todo son dudas en la rambla de Benipila. Sin una estructura clara y sólida en la directiva, el Cartagena no puede pensar en la siguiente temporada: no se conoce aún quién estará al mando de las operaciones, qué pasará con filial, bases y secciones, quien se hará cargo de la dirección deportiva ni quiénes le acompañarán en la comisión. Tampoco se sabe qué actores buscarán para liderar su proyecto, quién ocupará el banquillo ni, mucho menos, qué jugadores serán los más indicados para su estilo de juego.

Situación económica límite

Las dos últimas ventanas de fichajes han tirado de la manta de la situación económica del FC Cartagena. Sobre todo, la del pasado verano. Las inusuales dificultades para un club de Segunda en la empresa de firmar jugadores provocaron un clima de crispación entre el aficionado albinegro, que exigió explicación. No la tuvo, pero descubrió algunos datos como la sanción de LaLiga a la entidad cartagenera que le limitó el gasto al 40 por ciento de sus ingresos debido a un enorme déficit de 2 millones de euros durante los últimos cuatro años.

Posible venta del club

Por todos es sabido, aunque ocultado durante años, que el FC Cartagena no pertenece a Paco Belmonte. Según el registro mercantil, el cien por cien del capital social del club está a nombre de la empresa Duino Inversiones, participada en un 85 por ciento por Fernando Luque Carreño -hombre de confianza de Felipe Moreno- y en un 15 por ciento por el presidente albinegro. Aunque Belmonte se afana en afirmar que el club es de su propiedad debido a acuerdos privados, la más que evidente vinculación con el presidente del Real Murcia no sienta bien en el Cartagonova.

Además de la conexión económica, dado que Moreno podría estar detrás del manejo de Duino Inversiones a pesar de no aparecer en sus datos empresariales, el Cartagena también comparte estrategia legal con Felipe. El abogado personal del actual presidente del Real Murcia y quien le acompaña en todos los trámites jurídicos es también el encargado del área legal del conjunto cartagenero: Andrés López. Si hay negociación para la venta del club, el letrado conducirá el acuerdo.

Futuro deportivo bloqueado

El futuro deportivo del FC Cartagena depende enteramente de la situación en la directiva. Mientras no hay nada claro en las oficinas del Cartagonova, Julián Calero ya ha encontrado su sitio en el Levante y dejará al conjunto albinegro sin capitán del barco. Precisamente, el ambiente de cambio en la entidad no ayuda a la posible continuidad del técnico ni del proyecto, que sufrirá cambios importantes.

A la segura marcha del entrenador se le une la difícil confección de la plantilla. Sin garantías institucionales ni económicas, el Cartagena no se puede lanzar al mercado de fichajes. La situación interna del club no es ajena al exterior y, si nada cambia, será difícil convencer a agentes y futbolistas prometedores de su llegada a Benipila. La marcha de los cedidos, hasta seis en el equipo, deja al club bajo mínimos, pero con el camino despejado para comenzar una nueva etapa a todos los niveles.