Crónica

El fútbol y el Yeclano triunfan ante el Lleida en un día de fiesta

Numancia, Logroñés y Zamora, entre los rivales posibles

Jugadores del Yeclano Deportivo 
celebran su pase a la final del 
play off por el ascenso.  pascual aguilera

Jugadores del Yeclano Deportivo celebran su pase a la final del play off por el ascenso. pascual aguilera / David Castillo

David Castillo

El Yeclano Deportivo venció con todo merecimiento al Lleida (2-0) y consiguió la clasificación a la final del play off de ascenso a Primera Federación. Los de Adrián Hernández sentenciaron la eliminatoria en la segunda mitad con dos goles de Víctor Olmedo y ya esperan a su rival en la final, que giran en torno al Numancia, el Logroñés y el Zamora.

La primera mitad fue azulgrana. El Lleida comenzó el partido con voluntad de tener más balón, pero la buena colocación de los locales le impedía llegar al área. Solo un saque de esquina generó problemas, resolviendo Zarco con los puños.

Pasado el cuarto de hora contemplativo de los de Adrián, se dio un arreón local que erigió como protagonista al portero Iñaki Álvarez. Primero sacó una gran mano a a Naranjo, después paró un disparo seco de Salinas. El Yeclano se gustaba, la grada disfrutaba pero el gol no llegaba.

Pedrosa, que entró en el último momento en el once por lesión de Iván Pérez durante el calentamiento, fue uno de los más destacados. El Yeclano sacó varios córners en los que hubo de todo, y donde pidió penalti por agarrón. Iniesta golpeó después desde la frontal, y de nuevo Salinas probaba suerte ante un arquero que lograba parar todo lo que intentaban. Por su parte, el Lleida tuvo un importante contratiempo con la lesión de Montero, quien dejó su espacio a un ariete más de envergadura como Becerra.

La segunda parte fue más arrítmica pero continuó con un Yeclano férreo que no concedía apenas a un Lleida que no transmitía. El primer tiro a puerta de los catalanes fue un disparo de Chuli que respondió Zarco al poco de reanudarse el juego. Pero pronto Pedrosa disparó en la frontal e Iñaki Álvarez volvió a lucirse.

Sin apenas sensación de riesgo, el temor de La Constitución era algún chispazo individual donde el Lleida se metiera de nuevo. Lo más cercano que tuvo fue un remate a la contra de Ton Ripoll en el único boquete que dejó la zaga azulgrana. Hasta el punto que era el Yeclano más vertical y peligroso. Naranjo y Pedrosa volvieron a rozar el gol, justo cuando la entrada de Serpeta permitía estirar al equipo en los momentos que se requerían.

Será difícil de olvidar el emocionante canto del Abuelo que La Constitución coreó a flor de piel. Ese mágico momento solo podía concordarse con la victoria local, y así iba a ser. Y ante una obra futbolística de carácter coral como la azulgrana, se iba a certificar con un doblete de un lateral derecho. Un reflejo perfecto del espíritu del conjunto de Adrián en esta bendita maravilla del fútbol modesto.

Víctor Olmedo, en una internada por dentro, recibió una asistencia de ensueño con un pase bombeado de Juanje que le dejó dentro del área, donde reventó la bola para abrir la lata. Surgió el éxtasis de La Constitución y se ponía la guinda al emblemático fin de semana de San Isidro. Para culminar, Serpeta se marchó de Quadri y éste le derribó en un claro penalti. De nuevo Olmedo finiquitaba todo rompiendo la bola de forma inalcanzable para el portero.

Con criterio, Miranda Bolaño pitó el final sin añadido, y se dio entonces un momento de grandeza de las que hacen volver a creer en el fútbol. Tras una semana de máxima tensión, con el botellazo al delegado Popi en el Camp D’Esports y todo en lo que acabó derivando, esa tensión se transformó en ejemplo y en deportividad. Adrián Hernández convocó a los suyos en el centro del campo, y antes de cualquier celebración acudieron a aplaudir al centenar de aficionados del Lleida allí presentes. Ovación que se hizo extensiva por toda la grada, aplaudiendo a una afición rival que se comportó de forma extraordinaria en Yecla, demostrándose que la principal víctima de la acción de algunos energúmenos fueron el Lleida y su afición.