Primera RFEF

Un Real Murcia sin profundidad solo empata ante el Castilla (0-0)

Pablo Alfaro tiene mucho trabajo por delante para encontrar una mejor versión de un conjunto grana que ante los blancos apenas se deja ver en ataque y que vuelve a ser sostenido por el meta Manu García

Ángela Moreno

Ángela Moreno

Lo de entrenador nuevo, victoria segura no se cumple siempre. Se confirmó este domingo en Nueva Condomina. El Real Murcia, con Pablo Alfaro como novedad en el banquillo, no logró la victoria. Los granas no pasaron del empate a cero contra el Madrid Castilla. Tiene mucho trabajo por delante el técnico maño, que esta semana apenas ha podido dirigir en tres sesiones a los murcianistas. Aunque se vio a un Real Murcia más peleón y más conjuntado en tareas defensivas, los murcianos volvieron a suspender en ataque. De hecho, fueron los de Raúl González los que más cerca estuvieron de la victoria. Tuvo que aparecer de nuevo el meta Manu García para sostener a los suyos.

Con entrenador nuevo en el banquillo del Real Murcia, había demasiadas incógnitas que resolver en este primer encuentro de Pablo Alfaro. Una de ellas era la alineación que elegiría el maño en su debut. Dijo en su presentación que no iba a hacer una revolución, y más o menos mantuvo su idea. Aunque, como se le venía reclamando a Gustavo Munúa desde casi el principio, Alfaro puso en foco en el centro del campo. Con un trivote saltaban los murcianistas al terreno de juego. Tomás Pina, Isi Gómez e Imanol eran los elegidos. También cambió la cara el entrenador aragonés a los extremos. Dejaba a Carlos Rojas y a Dani Vega en el banquillo, dando minutos a Álex Rubio, que sigue teniendo protagonismo, y a Guarrotxena, que aparecía por la derecha. El '9', otra de las incógnitas a resolver, fue en este primer partido Rodri Ríos, que ganaba la partida a Carrillo.

Donde menos cambios hubo fue en defensa, aunque también es verdad que en esa línea hay poco donde elegir. Andrés López, del Imperial, sumaba una titularidad más, haciendo pareja en el centro de la zaga con Alberto González. La novedad era Zalaya que volvía tras una lesión. Y la sorpresa fue Sergio Santos, que aunque repetía en el once, lo cierto es que más de uno esperaba en esa posición a José Ruiz.

Conocida la primera alineación de Pablo Alfaro, las miradas ya estaban en el terreno de juego y en la imagen que dejarían los murcianistas. Y hubo de todo en los primeros cuarenta y cinco minutos. Con más presencia en el centro del campo, el Real Murcia ganó solidez defensiva, sobre todo ante un Real Madrid Castilla con gusto por tener el balón.

Los granas, nulos en ataque en la primera parte

Se vio a un Real Murcia más batallador, más pendiente de cualquier lucha, pero en ese inicio de partido faltó mayor presencia ofensiva. De hecho, para ver el primer remate entre los tres palos de los locales hubo que esperar hasta el minuto 42. Fue un disparo lejano de Álex Rubio que detuvo sin problemas Cañizares.

Y es que el Real Murcia pocas veces miró al área contraria. Y cuando lo hizo fue en soledad, porque con un equipo tan retrasado, cuando el balón pasaba del centro del campo, apenas había piezas para que los murcianistas pudieran poner en aprietos a la defensa madridista.

Casi todo el protagonismo fue para el Real Madrid Castilla. Ni cinco minutos necesitaron los de Raúl González para hacerse con el control del balón. La posesión era toda para los visitantes, aunque eran incapaces de superar la línea defensiva, apenas generando peligro para suerte de los de Alfaro.

El césped en muy mal estado

También ayudaba al Real Murcia el mal estado del césped de Nueva Condomina. Con una hierba impropia de un campo de la categoría del murciano, los blancos tenían dificultades para mover el balón. Tampoco había detalles de clases de los jóvenes jugadores madridistas. Un disparo desde fuera del área de Mario Martín en el minuto 12 obligó a reaccionar a Manu García, que enviaba el esférico al córner.

Nico Paz, que entraba en el once de Raúl González pese a jugar este sábado unos minutos con el primer equipo en el Bernabéu, y Peter también probaron a Manu García, aunque siempre desde fuera del área.

Salió el Real Murcia empanado como siempre. Será una de las asignaturas pendietentes que tendrá que cambiar Pablo Alfaro. Y pudo pagarlo caro el cuadro grana. Se escapó gracias a Manu García, decisivo ya hace una semana. Apareció el meta catalán en un cabezazo de Asencio. Con las piernas sacó el remate del madridista, que estaba completamente solo para recibir un balón que llegaba desde el córner (51).

El Castilla se queda con diez

Se volvió a igualar el partido, pero el Real Murcia seguía sin poder generar peligro en el área de Cañizares. Lo pudo hacer en una contra que lanzaba a Guarrotxena, pero el jugador grana era derribado por Asencio cuando ya iba a plantarse en el área. No dudó el colegiado en expulsar al madridista en el 60 por roja directa.

A la vez que el Real Madrid Castilla se quedaba con diez, Alfaro movía el banquillo en busca de una reacción que acercara a los granas a la victoria. Saltaban al campo Montoro y Dani Vega. Se marchaban Isi Gómez y Álex Rubio.

No había forma de ver a un Real Murcia ambicioso, yendo a por la victoria, solo en algún centro llegaba a la meta de Cañizares, como ocurrió en un balón colgado por Zalaya que palmeó el meta madridista o como otro intento de Rojas que se paseó por el área sin encontrar a ningún futbolista grana.

Porque en el 74 llegaba nuevos cambios para los locales. Esta vez Alfaro apostaba por Carlos Rojas y Carrillo. Entraban en lugar de Guarrotxena e Imanol.

Aumentó su posesión el Real Murcia, teniendo más control en el centro del campo, pero la sensación de peligro no llegaba. No tenían profundidad los granas, y entrado el partido en la recta final parecía que si el marcador se movía sería del lado madridista.

No es que los de Raúl González estuvieran asediando, pero tenían sus opciones. Una clarísima llegó en el 82. Palacios se colaba en el área y servía a Víctor Muñoz al que su balón cruzado se le fue por apenas unos centímetros.

La mejor ocasión grana en el 87

Hubo que esperar al 87 para ver la mejor ocasión del Real Murcia. Carrillo a la media vuelta se saca un disparo que obliga a reaccionar a Cañizares.

Animó esa opción a los granas, que se estiraron en los últimos metros ante un Real Madrid Castilla que, con diez, ya se conformaban con salvar el empate. Pero ese arreón tampoco sirvió para que llegaran las ocasiones. Eran los centrales madridistas los que iban sacando cualquier balón que llegaba al área. Con el tiempo ya cumplido, De la Vega se probó desde fuera con un balón que cogió efecto pero que no fue suficiente para colarse por la escuadra.

Al final el marcador no se movió, confirmándose el gran trabajo que tiene Pablo Alfaro por delante para que empiecen a llegar las victorias y los buenos momentos.