El peor Cartagena de la historia en 2ª

El FC Cartagena no levanta cabeza. La mala gestión económica que ha mantenido el club durante los últimos años ha terminado viendo la luz sobre el césped en la cuarta campaña consecutiva en Segunda y en ella se han igualado e incluso superado algunos de los peores registros históricos del fútbol en la ciudad. Nunca antes había tenido un conjunto cartagenero un inicio tan negativo el fútbol profesional y la nefasta racha de derrotas en casa supone el peor arranque en la historia como local en el fútbol profesional. Los números no engañan y calculan un futuro muy complejo para el cuadro dirigido por Julián Calero, que ya es el peor Cartagena de la historia en Segunda.

Once partidos, una sola victoria, dos empates y ocho derrotas. El bagaje del equipo resuena en la cabeza de todos los cartageneristas mientras intentan aceptar la realidad que les rodea. Una realidad sólo vaticinada por algunos durante el pasado verano, pero familiar ahora para todos por culpa de los pobres resultados. La mala planificación deportiva que confeccionó una plantilla llena de carencias y propuso a Víctor Sánchez al frente del proyecto ha conducido al equipo a un pozo que cada vez está más oscuro. No en vano, el equipo está marcando historia negativa.

En un repaso por los registros históricos no podemos tener en consideración las dos etapas disputadas en Segunda por el Cartagena Club de Fútbol -Cartagena Foot-ball Club antes de la prohibición de extranjerismos-, dado que contaron con sistemas muy diferentes al conocido actualmente. El Cartagena Foot-ball Club fue uno de los 20 equipos que fundaron la Segunda y formó parte del segundo grupo -de sólo diez equipos- para terminar descendiendo en último lugar tras dieciocho jornadas. En la segunda, de tres temporadas desde 1939 hasta 1942, las reestructuraciones por grupos, variaciones en el sistema de puntos o la diferencia en la duración del curso hacen imposible la comparación con nuestro tiempo. Aún así, ninguna de ellas tuvo un inicio tan negativo.

Más clarificadores son los registros del Cartagena Efesé FC, segundo equipo de la ciudad portuaria que llegó a Segunda. Este disputó ocho campañas en la categoría en dos etapas diferentes -del 61 al 63 y del 82 al 88- y nunca experimentó resultados tan desfavorables como los presentes. Siempre ganó 2 partidos o más en las primeras 11 jornadas excepto en 1986, aún por encima del actual Cartagena con dos derrotas menos y dos empates más.

También fueron mejores las seis temporadas anteriores del FC Cartagena en Segunda. En 2009 era primero tras once jornadas, en 2010 sumó cuatro victorias y en 2011 otras cuatro. En 2020 logró cuatro, también en 2021, y seis en 2022.

En este contexto se ha producido otro récord que, por desgracia, refleja el momento que vive el equipo durante esta 2023-24. Hay que remontarse hasta el 22 de abril para recordar la última victoria en casa del Cartagena, frente al Sporting por 2-1. Esto significa que el cuadro albinegro suma ocho partidos seguidos en casa sin ganar. Esta temporada, la racha de seis derrotas consecutivas en el Cartagonova supone el peor inicio de temporada de la historia como local de cualquier equipo cartagenero en Segunda y es la tercera más desfavorable en cuanto a derrotas en casa de la historia de la competición.

Debe el conjunto portuario comenzar a romper con estos registros y lograr hitos positivos para salir del atolladero. Necesita el Cartagena cosechar la mitad de los puntos restantes para lograr la salvación teórica con 50 unidades en un sprint que apenas cuenta con precedentes.

Paco Belmonte y Manolo Breis, increpados a su salida del Cartagonova tras el partido

La derrota del pasado sábado del Fútbol Club Cartagena frente al Racing significó mucho más que un simple partido perdido. Además de certificar la octava derrota del curso de los albinegros, supuso la ruptura definitiva entre gran parte de la afición y la directiva del club.

A pesar de que la grada del Cartagonova no tuvo ningún gesto de descontento con el palco durante el partido ni al término del mismo, fue a la salida del estadio donde se precipitaron los hechos: Paco Belmonte y Manolo Breis, que se disponían a abandonar el recinto por la puerta principal, recibieron la represión de una veintena de aficionados que esperaban su paso.

Los directivos, que decidieron no abandonar el estadio por seguridad, requirieron la presencia de la Policía Nacional en la entrada para asegurar su protección. Unos diez agentes de la Policía Nacional formaron frente a la puerta hasta que el ambiente se calmó pasados unos minutos.

La relación entre la afición y la directiva se ha visto muy deteriorada desde este verano tras las desafortunadas declaraciones de Belmonte y Breis en reiteradas ocasiones sobre aquellos que cuestionan su trabajo.

El filial albinegro sufre en Marbella un excesivo castigo en el descuento

Tampoco le acompaña la suerte al Cartagena B en su andadura en el Grupo IV de la Segunda RFEF. El filial albinegro, que es colista con tan solo un punto en su casillero, se topó con la derrota en su visita a Marbella de la manera más cruel posible, pues cuando todo parecía indicar que el encuentro se resolvería con empate sin goles, un tanto de los locales en el último suspiro condenaba a los pupilos de Pepe Aguilar.

Ya se antojaba complicado el partido para el Cartagena B desde antes del inicio, pues visitaba nada más y nada menos que al líder destacado del grupo, un Marbella invicto que durante los primeros veinte minutos de juego mostró su dominio, mientras que el filial albinegro se limitaba a crear tibio peligro con transiciones rápidas en ataque. Tan solo Christ fue capaz de detener las intentonas locales para que el duelo se marchase al descanso con empate en el marcador.

Ya en la segunda mitad, el Cartagena B se desperezó poco a poco hasta llevar el peligro a la meta de un Marbella que por ocasiones sufrió más de lo esperado. Pero el fútbol tiene estas cosas, y en el último suspiro de partido, Soto de cabeza aprovechaba un magnífico centro de Ohemeng para batir al meta cartagenerista y darle a su equipo los tres puntos. Un excesivo castigo para el Cartagena B que se sigue hundiendo en la tabla.