El Fútbol Club Cartagena salvó el pasado domingo una importante bola de partido en relación a sus aspiraciones de alcanzar la promoción de ascenso a final de temporada. Contra uno de los mejores equipos de la categoría que se ha convertido en rival directo por el gran nivel albinegro, los albinegros remontaron un partido que parecía imposible gracias al intervencionismo de su entrenador. Fue superado el Cartagena por el Eibar al inicio del partido y recibió la penalización máxima por la falta de actitud visible en los jugadores. No encontró su juego de ninguna de las maneras y se mostró desorientado sobre el terreno de juego hasta que, tras el descanso, una sustitución clave cambió el desempeño de todo el equipo y llevó el empate al marcador. La lectura del juego de Carrión le permitió seguir viendo oportunidades y otro ajuste terminó dando el partido a los suyos en el último momento.

Los cambios de Luis Carrión condujeron a los suyos a la victoria, si bien es cierto que su planteamiento inicial ante el equipo armero estuvo desacertado. Su disposición con cuatro hombres en el centro -Musto, Tejera, Sangalli y De Blasis- no encontró los espacios interiores que buscaba el entrenador, las bandas con altura asimétrica para Jairo y Calero no funcionaron y le costó horrores al Cartagena circular la pelota como suele hacerlo. «Quería tener cuatro hombres en el centro ya que preveía su línea de cinco y sus pivotes son de saltar a la presión, pero nos han orientado la salida hacia la izquierda, donde no teníamos claridad, y no hemos sido capaces de circular por derecha», explicó el técnico al término del partido.

La solución del catalán fue dar entrada a Borja Valle por Datkovic retrasando a Jairo a la línea defensiva para amenazar con la llegada de ambos por banda y recolocar a Sangalli más abierto en la izquierda. Con la misma serenidad que encontró la solución en medio de la tensión del partido argumentó después en sala de prensa sus variaciones para solventar el bloqueo de la primera parte. «El descenso de Jairo al lateral en la segunda mitad ha generado correcciones en ellos y espacios en otros sitios», manifestó. Aunque el empate llegó desde el punto de penalti -curiosamente en una falta sobre Valle- y provocado en una acción a balón parado, las sensaciones del equipo fueron totalmente diferentes tras la reanudación.

El conjunto albinegro no varió en ningún momento su idea de juego y eso permitió a Carrión hacer correcciones sobre una misma base. Con el partido empatado y el Eibar buscando la victoria, el siguiente cambio fue reforzar el doble pivote con Mikel Rico y poner a Isak Jansson a correr la banda izquierda para amenazar a la contra, lo que oxigenó al equipo. También entró Ortuño, que sería decisivo a la postre. Ya moría el partido cuando la última jugada del técnico cartagenerista dio jaque mate a los armeros. Delmás sustituyó a De Blasis y se colocó en el lateral derecho provocando el desplazamiento de Calero a la derecha. Jairo adelantó su posición de vuelta al extremo zurdo y Valle ocupó el hueco de Pablo De Blasis por el centro.

Como si de un guion escrito se tratase, fueron Jairo y Calero los que cocinaron el tanto de la victoria por la izquierda y Ortuño el que dio los tres puntos a los suyos con su mejor virtud. El fútbol terminó dando la razón a Luis Carrión después de equivocarse y rectificar y no es la primera vez que pasa desde que llegó al Cartagena. También en esta temporada fue clave su intervención frente al Málaga y Alfaro recientemente para lograr dos importantes triunfos.

El gran desempeño tanto del equipo albinegro como de su entrenador han llevado al club a acercarse a su mejores registro históricos. Este Cartagena se encuentra a un solo punto de los números de la campaña 2009-10 a estas alturas y las previsiones auguran lo mejor para un equipo que no deja de soñar a la vez que trabaja.

El club albinegro promociona el abono para la segunda vuelta

El Fútbol Club Cartagena vuelve a abrir sus oficinas para aceptar nuevos socios de cara a la segunda mitad de la temporada. Doce partidos son los que restan de competición en el Estadio Municipal Cartagonova hasta final de campaña y en el club albinegro quieren seguir aumentando el número de abonados aprovechando el gran momento de forma del equipo y el buen fútbol que despliega. Tiene el conjunto cartagenero opciones de conseguir algo grande a final de curso y necesita del apoyo de la ciudad portuaria para lograrlo.

La gran primera parte de temporada que ha firmado el FC Cartagena deja las puertas abiertas para soñar. El play off no es una idea tan descabellada y en el club son conscientes de la ilusión que ha generado el equipo hasta ahora. Por ello se abren de nuevo las inscripciones, como cada año, incluyendo los dos últimos de la primera vuelta en casa bajo el lema ‘La ilusión palante’. Desde la tarde de ayer se pueden abonar los aficionados albinegros que no lo hicieron durante la campaña de verano

Los precios de los nuevos abonos oscilan entre los 135 euros en lateral bajo y fondos altos hasta los 155 en tribuna baja. Por otro lado, el club no pondrá a la venta localidades de tribuna alta argumentando la falta de espacio libre. El desglose completo de precios es el siguiente: fondos altos por 135 euros para adultos y 45 para niños; lateral bajo por 135 euros para adultos y 45 para niños; lateral alto por 145 euros para adultos y 55 para niños; y, por último, tribuna baja por 155 para adultos y 65 para niños. La edad para el abono más joven es la comprendida entre los 6 y los 14 años.

Los aficionados que deseen abonarse para esta segunda mitad de campeonato deben hacerlo en las oficinas del Municipal Cartagonova, en horario de lunes a jueves de 10.00 a 14.00 por la mañana y de 16.30 a 20.30 por la tarde y los viernes desde las 10.00 hasta las 14.00. Los abonos también se pueden adquirir de manera totalmente online a través del portal compralaentrada.

Después de batir el récord histórico de abonados con 8.653 socios, la campaña de invierno puede hacer crecer aún más ese número y marcar un hito en la historia del club.