Aislado en la planta superior del dúplex de sus padres en El Palmar es como está pasando el segundo confinamiento del año Carlos Alcaraz, quien la pasada semana, por un positivo por coronavirus, vio truncado su final de temporada cuando ya estaba concentrado con la selección española para disputar la Copa Davis, que concluyó en la madrugada del lunes para España con la eliminación en la fase de grupos ante Rusia.

El pasado jueves, nada más conocerse el positivo del joven tenista murciano, se puso en marcha un dispositivo para que pasara esta segunda cuarentena del año en el domicilio de su familia. Una ambulancia medicalizada, donde viajó aislado, le trasladó hasta Murcia. Sus padres prepararon la segunda planta de su casa para que estuviera durante estos días solo, sin contacto con nadie. La instalaron una bicicleta estática y le dejaron material para poder hacer deporte. El jugador está en contacto permanente con su preparador físico, quien todos los días le pasa una rutina de ejercicios para que no pierda la condición física y puede iniciar de inmediato la pretemporada, como está previsto. El próximo jueves será sometido a una nueva PCR y si da negativo, el viernes podrá reanudar ya su vida normal. En caso contrario, tendrá que esperar al domingo.

Estudiando, leyendo y viendo partidos de la Copa Davis es como está pasando este tiempo Carlos Alcaraz, quien ya vivió una situación idéntica a principios de año, cuando tuvo que hacer un confinamiento en Australia al detectarse un positivo en el avión en el que viajó desde Emiratos Árabes hasta Melbourne para disputar el primer Grand Slam de la temporada. Entonces la situación fue peor, ya que se encontraba solo, sin apoyo de nadie y a muchos kilómetros de su casa. Ni siquiera Juan Carlos Ferrero, su entrenador, pudo estar cerca de él los primeros días. Después sí que le permitieron instalarse en una habitación contigua a la suya.

Pese a pasar todas estas vicisitudes y sufrir una lesión tras el US Open donde llegó hasta los cuartos de final, la temporada de Carlos Alcaraz ha sido para enmarcar. Ahora ya está pensando en la próxima, que comenzará en enero en Australia, pero aún se desconoce si será directamente en el primer Grand Slam del año o previamente disputará algún otro torneo o la Copa ATP defendiendo a España. En cualquier caso, el equipo técnico que dirige Juan Carlos Ferrero quiere incidir en la pretemporada en varios aspectos del juego y en fortalecer más físicamente al jugador. Está previsto que haga unas seis semanas de trabajo previo sin competir, es decir, que hasta la tercera de enero no estaría en disposición de volver a jugar, que coincide con el arranque el 17 de enero del Abierto de Australia en Melbourne. Tras este Grand Slam comenzará una gira por Sudamérica, donde ya está anunciada su presencia en el ATP 500 de Río de Janeiro. Después viajaría hasta México para jugar en Acapulco y posteriormente afrontar Indian Wells, el primer Masters 1.000 de 2022.

El futbolista Gonzalo Villar también da positivo

Gonzalo Villar, futbolista de La Alberca que milita en la Roma, también está confinado tras dar positivo en coronavirus. Se da la circunstancia de que Carlos Alcaraz y el jugador estuvieron juntos en el Next Gen de Milán, donde incluso participó en la fiesta del título invitado por el tenista de El Palmar, con quien guarda una buena relación de amistad. Dónde y cuándo pudo contraer Alcaraz el coronavirus es una incógnita, pero todo apunta a que fue antes de concentrarse en Madrid.