Cuando todos los ojos deberían estar puestos en la mala situación deportiva y en la falta de liquidez para afrontar los pagos del primer semestre del año, en Nueva Condomina se ha abierto una nueva guerra de guerrillas por el control del Real Murcia. Desde hace unas semanas ya eran evidentes las diferencias entre el grupo de Francisco Tornel y los representantes del KBusiness, pero a raiz de la destitución de Manolo Herrero y la búsqueda de un nuevo entrenador, la batalla se ha recrudecido de tal manera que en la noche de ayer se vivió un duro enfrentamiento entre ambas partes. La situación es tan grave que esta misma tarde tanto unos como otros han quedado citados en las oficinas del estadio murcianista para celebrar una reunión de urgencia, y es que desde anoche varios de los integrantes del KBusiness, sociedad que controla la mayoría de las áreas de dirección de la entidad, amenazaron con dimitir si no se tienen en cuenta sus peticiones. A falta de conocer si finalmente se producen esas salidas, el que no continuará en el Real Murcia es Pedro Cordero. Solo dos meses después de aterrizar en Nueva Condomina, el cartagenero ha decidido abandonar el club. Mañana a las once y media dará una rueda de prensa en la que explicará su dimisión, aunque lo normal es que lo vista como un pacto amistoso entre ambas partes.

Pedro Cordero es la primera víctima de la batalla campal que estos días están disputando en las oficinas de Nueva Condomina el KBusiness y Francisco Tornel. El KBusiness es una Sociedad Limitada creada a finales de enero. Solo unos días después, tras la junta de accionistas del Real Murcia, todos los miembros de la mercantil pasaban a ocupar puestos de responsabilidad en las oficinas de Nueva Condomina. Con Francisco Miró como consejero delegado del club, Francisco Cobacho ocupando otra silla en el consejo de administración y Antonio Ruiz ejerciendo de secretario, Emilio García, Daniel Moreno y Francisco Martínez Rivas encabezaban tres de las áreas de dirección. Defendiendo que representan a las empresas que se animaron a participar en la ampliación de capital, el KBusiness se alzaba con el control ejecutivo, firmando la casi defunción de la PARMU y dejando a Francisco Tornel, sin capacidad para obtener liquidez, como una figura simplemente representativa.

El papel a representar por cada uno parecía claro, aunque desde el pasado martes ambas partes han iniciado una batalla que no tiene fin y que puede agravar todavía más una crisis en los despachos que también se ha instalado en el vestuario. La disputa ha saltado a la luz por las diferencias surgidas tras la destitución de Manolo Herrero. Y es que mientras que el KBusiness apuesta por la contratación de Julio Algar como técnico, en el bando de Tornel rechazan el fichaje del madrileño. El que se ha quedado sin sitio es Pedro Cordero, quien mañana anunciará su salida del club, ya que con esta crisis, quedaba confirmado que ha estado atado de pies y manos y sin ninguna capacidad de decisión pese a ser contratado a finales de diciembre como director deportivo.

Cordero llegó al club por Francisco Tornel. El máximo accionista se encargó de dar la vuelta a una votación que inicialmente había salido favorable a Julio Algar. A los dos meses, el KBusiness, que quiere contar con el madrileño sí o sí, ha aprovechado la destitución de Manolo Herrero para volver a hacer fuerza por la llegada del ahora miembro de la secretaría técnica de la Cultural Leonesa, una decisión con la que no está de acuerdo Tornel.

En la noche de ayer todo saltó por los aires. Y los defensores de Tornel sacaron toda la artillería para atacar la decisión del KBusiness de fichar sí o sí a Algar. Para subestimar tanto la capacidad de los integrantes de la sociedad limitada como la valía del técnico madrileño, algunos de algunos de los consejeros puestos a dedo por el notario no dudaron en dejar entrever que Algar no está preparado para el banquillo del Real Murcia porque en el Lorca FC, club al que dirigió durante una parte de la temporada 2016-2017, simplemente se limitaba a hacer lo que le ordenaba el dueño, Xu Gembao, insinuando además que el empresario chino incluso tenía cierto poder para influir en las alineaciones.

El calentón continuaba con varios de los integrantes del KBusiness hablando de dimisiones. La batalla continuará esta tarde en Nueva Condomina. Tanto los integrantes del consejo de administración como los responsables del área de dirección se han citado en una reunión urgente para no seguir echando gasolina a un fuego que cada vez aparece por más frentes. De momento, el Real Murcia no ha informado de manera oficial de dimisiones. Tampoco se ha convocado ninguna rueda de prensa del consejo de administración para explicar qué está ocurriendo en el club y por qué se ha abierto una guerra civil por el nombramiento del entrenador cuando los verdaderos problemas están en la falta de liquidez para afrontar los pagos que se vienen acumulando desde el 1 de enero. Mañana sí hablará Pedro Cordero, según se ha comunicado a los medios desde la entidad grana.