Entrevista | Salvador Torres Artista multidisciplinar

"Hemos creado mapas de recuerdos, de descubrimientos, de posibilidades y realidades, vividas o no"

El pintor cartagenero inauguró el pasado 28 de diciembre Il segno e la narrazione en la sala Movimento aperto de Nápoles, una exposición a cuatro manos junto al italiano Enzo Trepiccione

Este proyecto, un viaje por mapas de recuerdos, podrá verse en la galería napolitana hasta el día 25 de este mes. 

El artista cartagenero Salvador Torres.

El artista cartagenero Salvador Torres. / L.O.

Lola López

Lola López

Dentro de los confines de unas fronteras no solo ocurren ríos, montañas y valles. Las líneas del papel no solo delimitan territorios políticos y el paso del tiempo no afecta solo a los dominios de los dirigentes. Un lugar también lo conforman sus encuentros y desencuentros, las historias que en ese pedazo de tierra suceden momento tras momento, erosionando la identidad de un espacio con más fuerza, incluso, que el agua o el aire. Eso parece ser lo que Salvador Torres y Enzo Trepiccione han querido capturar en Il segno e la narrazione, su nueva exposición conjunta, que inauguraron a finales de diciembre en la napolitana sala Movimento Aperto. Los mapas son la base de este viaje, este diálogo, entre recuerdos, narración, música y figuras del color de lo onírico que preguntan qué fue o pudo haber sido, si su viaje termina o acaba de empezar, si el destino puede ser, a la vez, la casilla de salida.

[En el momento de esta entrevista] quedan apenas un par de días para que la muestra abra sus puertas, ¿Está nervioso? 

La emoción por exponer un proyecto que nos ha llevado meses de trabajo es inevitable a pesar de estar madurado y de haber sido una investigación plástica y vital que ha tomado forma conceptual a lo largo de los últimos años.

Exponen en la sala Movimento Aperto de Nápoles. ¿Qué les lleva hasta allí? 

Estamos muy orgullosos de participar en esta galería por invitación de su responsable, Ilia Tufano, artista que lleva manteniendo una programación sostenida por su equilibrado nivel expositivo. Fue un reto y un honor que nos propusiera presentar un proyecto para dicho espacio.

Una de las obras de Salvador Torres y Enzo Trepiccione

Una de las obras de Salvador Torres y Enzo Trepiccione / L. O.

Han llamado a esta muestra El signo y la narración, haciendo referencia a un diálogo, a un viaje por historias y geografías. ¿Qué querían capturar en esos conceptos? 

Queremos invitar al espectador de esta exposición a descifrar los diálogos e interrelaciones entre nuestros mapas estéticos: entre los grandes papeles pintados como códices entre lo plástico y lo caligráfico de Enzo Trepiccione y las narraciones sugeridas en cada una de mis obras, para llegar de esta manera a la conquista escénica mediante el signo y la narración de cada palabra y de cada obra. El signo como objeto, fenómeno, o hecho que evoca, y la narración como relato en el que se cuenta algo real o ficticio. Cada autor representa ambos aspectos con sus respectivas obras. 

Sobre mapas del siglo pasado y textos antiguos han representado otras figuras, otras historias; parecen realidades paralelas, historias que se solapan en el tiempo sobre esos territorios, ¿era la intención?

Cada autor ha planteado el viaje como un camino de ida o de regreso; como dentro o fuera del lugar de origen de cada persona, de nosotros mismos. Son mapas de descubrimientos, de recuerdos y de realidades o posibilidades, vividas o no. El resultado son unas obras conjuntas donde los caminos e interpretaciones estéticas pueden ser variados y de diferentes grados de complejidad. Como dice Mario Lanzione en el texto acerca de la exposición: «En las obras de Torres podemos intuir un testimonio dado a través de representaciones imaginarias que, en un lenguaje icónico, son reconstrucciones fantásticas que van más allá de la racionalidad expresiva reconocida. En las de Trepiccione se siente el deseo de retratarse en un mundo casi de cuento de hadas, expresado con símbolos y representaciones simples y espontáneas que, en cierto modo, son el examen de la propia experiencia de vida. Dos lenguajes que, más allá de las diferencias de orientación artística, plantean interrogantes sobre cuestiones que conciernen al ámbito social, psicológico y humano».

"El recuerdo idealizado nos ha ayudado a articular una imagen ilustrada de múltiples viajes"

Ese texto también dice que «será el espectador quien decida su grado de implicación» en el viaje que proponen en estas obras. ¿Cómo es esto?

La propuesta de una escenografía real y virtual (por medio de mapas antiguos) en la que interactúan dos artistas unidos por la utilización continuada del concepto escénico requiere del uso de los términos ‘dentro’ y ‘fuera’, concretamente dentro de las obras y fuera de estas al mismo tiempo; lo que pretendemos es la construcción de un escenario mediante la alternancia de lo que se encuentra en el exterior o interior de un espacio real o imaginario. Con ello pretendemos hacer reflexionar al espectador acerca de la similitud de cada recorrido vital como un viaje sobre escenarios que tienen mucho de fragmentos subjetivos en función de cada realidad vivida en ellos, o de tránsito sobre ellos, y por supuesto a ello se invita, a reflexionar, a cada persona que observe esas obras y quiera aplicar esa introspección sobre su experiencia vital.

Los mapas son una representación, en ocasiones, fría e impersonal del espacio geográfico. Estos parecen mapas emocionales, añaden otra dimensión a lo que pasa dentro de las fronteras, ¿no? 

Este diálogo artístico se ha planteado sobre un soporte que plantea un escenario real al que se alude continuamente mediante mapas que delimitan teóricamente territorios. Mapas antiguos, con límites que han cambiado a lo largo de la historia; como en un juego, sobre espacios que indican el tiempo transcurrido entre el pasado y el presente. Al observar en ellos cualquier variación desde nuestro momento, se puede entender el viaje como parte de nuestra propia naturaleza. Sobre eso hemos tratado de incidir, y también sobre la inmutabilidad de otros aspectos.

Una de las obras de Salvador Torres y Enzo Trepiccione

Una de las obras de Salvador Torres y Enzo Trepiccione / L. O.

Hábleme de los colores, porque contrastan mucho sobre el tono desgastado de los mapas; son joviales, incluso inocentes.

El recuerdo idealizado, o la manera de fantasear en la idealización de cierta visión naif, no exenta de ironía, nos han ayudado a articular una imagen ilustrada de múltiples viajes reales o imaginarios a cualquier época de cada historia personal. La superposición del conjunto iconográfico le confiere ese aspecto ingenuo.

En ocasiones también hay collage, por ejemplo en las obras que mezclan pintura, texto escrito y partituras de música, que son un lenguaje más, otro idioma de la sociedad para narrar.

Planteamos el medio escrito y el cartografiado como una forma de narración, y no pudimos pasar por alto la música como otra forma de narración vital. El collage nos ayudó a integrarlo todo y creo que será un medio más a añadir en el futuro creativo.

Como ha comentado, esta es una exposición que realiza junto a Enzo Trepiccione, ¿cómo surge este trabajo a cuatro manos?

Es una idea que llevamos pensando desde hace algún tiempo y creo que el medio elegido es el ideal a la hora que llevar a cabo un diálogo entre dos estéticas que parten de lugares alejados y que consiguen crear un juego estético convincente acerca de fragmentos vitales que pueden ser universales.

"Cada autor ha planteado el viaje como un camino de ida o de regreso a su lugar de origen"

¿Y qué rol ha seguido cada uno en estas obras?

Al principio tratamos de establecer un ritmo de trabajo por asociación de ideas, así que yo comencé a producir imágenes sobre los mapas y a partir de esa disposición, Enzo Trepiccione respondía con una síntesis basada en un relato de signos, acorde a su serie pictórica El jardín del Mago.

Ha expuesto en varios países, pero parece que hay un lazo especial con Italia, ¿qué le une a ese país? 

Son muchas las veces que he expuesto en Italia en los últimos años, la cercanía cultural con los artistas y comisarios con los que trabajo es muy natural por los múltiples lazos culturales y de carácter que tenemos en común. Ese es un aspecto que facilita todo el proceso a la hora de desarrollar proyectos como este.

Hasta el 25 de enero se podrá ver en la galería italiana, pero ¿habrá opción de verla pronto a este lado del Mediterráneo? 

La exposición tendrá una continuidad en este y otros soportes en un futuro cercano.