Goya 2023

Los cines Rex y Floridablanca de Murcia se cuelan en la gala de los Goya

El cineasta León Siminiani, muy vinculado a la Región, se alza con el premio al mejor cortometraje de ficción

León Siminiani, en el centro, sostiene el Goya por ‘Arquitectura emocional 1959’.

León Siminiani, en el centro, sostiene el Goya por ‘Arquitectura emocional 1959’. / Jorge Zapata

Lola López

Lola López

El cineasta cántabro Elías León Siminiani se alzó finalmente con el Goya al mejor cortometraje de ficción, al que también optaban las murcianas Eva Libertad y Nuria Muñoz-Ortín.

Siminiani, vinculado estrechamente a la Región tras cursar los estudios de Filología Hispánica en Murcia, gana el Goya con Arquitectura emocional 1959, un filme sobre una pareja de estudiantes universitarios cuyo flechazo se topa con las trabas, aparentemente insalvables, de la diferencia de clase social e ideología. «Este corto habla de la importancia que en nuestra vida tienen los espacios, que nos conforman como personas», aseguró el cineasta, que entre sus ‘propios’ espacios citó el cine Rex y el cine Floridablanca de Murcia, ya desaparecidos.

«A pesar de todo, seguimos llevando a nuestros hijos al cine», dijo en su discurso y, dirigiéndose a su hija Laura, manifestó que esa era la manera de trasladarle su amor infinito.

Desde la plataforma 'Cine Rex vivo' han agredecido en sus redes sociales el gesto del cineasta. "En Murcia seguimos luchando por la reapertura del cine Rex. Gracias a León Siminiani por acordarse del cine Rex y valorar como merece los espacios donde ver cine se convierte en una experiencia personal de película", han escrito.

Las responsables de Sorda, el corto dirigido, producido y creado por las murcianas Eva Libertad y Nuria Muñoz-Ortín, llegaban a la gala con el orgullo de estar nominadas con la primera obra cinematográfica protagonizada por una persona sorda y rodada en lengua de signos.

Protagonizada por Pepe Galera y Miriam Garlo, Sorda cuenta los problemas de comunicación de una pareja formada por una persona oyente y una persona sorda. El vínculo emocional de las directoras con su obra es especialmente fuerte, ya que la idea del cortometraje nace de los miedos e inquietudes de la propia Miriam Garlo, sorda en la vida real y hermana de la directora Eva Libertad, que reside en Molina. No pudo ser el Goya, pero la película ya atesora 60 premios internacionales y nacionales.

El estilista calasparreño Jesús Gil Bermúdez también disfrutó anoche de su segunda nominación en los premios de la Academia, aunque finalmente se fue de vacío. Su trabajo, junto a su compañera Irene Pedrosa, en As bestas, la película de Rodrigo Sorogoyen que partía como favorita, le valió la nominación a mejor maquillaje y peluquería.