El impacto del Rock Imperium superó los cuatro millones de euros

El Rock Imperium Fesival de Cartagena, que el pasado verano celebró su primer edición, generó un impacto económico superior a los 4 millones de euros durante el fin de semana del 24 y 25 de junio. Así lo anunció este lunes la alcaldesa de la ciudad, Noelia Arroyo, tras reunirse con el director del festival, Juan Antonio Muñoz, y el autor del informe, Antonio García.

La estancia media de los participantes fue de casi dos días, con un gasto medio superior a los 340 euros. Así, por ejemplo, las cifras se acercan al millón y medio de euros en alojamientos, más un millón en restauración y gastos en comercio, taxis y otros servicios para un total de 3,35 millones. Por tanto, el impacto del festival, sumando consumo y organización, es superior a los 4,15 millones, «a los que habría que añadir la repercusión mediática, valorada en casi un millón de euros», apuntan desde el Consistorio.

Kiss encabezarán la segunda edición del Rock Imperium Festival de Cartagena

Para entender estas cifras hay que tener en cuenta que el 76% de los espectadores eran de fuera de Cartagena: un 20% de la Región, un 54% de otros puntos del país y un 3,5% de extranjeros.

La alcaldesa ha calificado los datos como «excelentes», pero las expectativas de cara a la segunda edición –prevista para el 23, 24 y 25 de junio– son aún mejores, según señala, ya que «el 95,5% de los encuestados dicen que repetirán este año y el estudio deja claro que el éxito del festival será mayor con una marca ya conocida y por la mayor distancia de la época de pandemia». Y los datos confirman esa tendencia: «Ya hemos superado el 60% de la venta de entradas». 

Por su parte, el director del festival destacó tras la reunión que el Rock Imperium Festival tiene un significativo impacto económico en valor añadido generado, superior a la media de los festivales que se organizan en España. Además, destacó también que aunque la creación de empleo no fue muy notable, sí lo fue la contratación por un tiempo reducido, acorde al tipo de evento que representa un festival de música, y quiso valorar a su vez el impacto social favorable que generó el festival para los residentes, «que no percibieron molestias o inconvenientes significativos. Los residentes apoyan la repetición de sucesivas ediciones».