Los 8.000 empleados de atención a la dependencia sacan a la calle su protesta

Los trabajadores de los centros concertados de educación especial han arrancado este miércoles las movilizaciones para reclamar «una negociación del convenio colectivo seria» a las organizaciones que atienden a las personas con discapacidad de la Región y que gestionan los centros de empleo. CC OO ha avanzado que tras la concentración celebrada ante la sede de Plena Inclusión, una de las instituciones que dedicadas a la prestación de servicios profesionales a la discapacidad, habrá nuevas protestas e incluso están dispuestos a llegar a convocar paros en los centros de trabajo.

El responsable de servicios Socioeducativos Privados de la Federación de Enseñanza de CC OO, Iván Fueyo, informó de que los profesionales contratados por estas instituciones pretenden conseguir una distinción clara de los salarios de las distintas categoría laborales, que «han quedado superados por la subida del salario mínimo». 

Recuerda que en los últimos años se ha producido un incremento del salario mínimo del 54%, que ha superado incluso los sueldos más elevados y ha difuminado las distintas categorías laborales existentes hasta ahora. 

Añadió que algunos de los complementos que tenían los trabajadores antes del incremento salarial han quedado incluidos dentro del sueldo base, por lo que no están percibiendo la mejora que les correspondería si mantuvieran los pluses absorbidos.

Reclaman también el establecimiento de complementos por antigüedad, ‘penosidad’ o ‘peligrosidad’, dado que «algunos empleados de los centros especiales de empleo trabajan en un vertedero de basura».

Fueyo se queja de que, después de un año y medio de negociación, «no hay seriedad por parte de las patronales para conseguir mejorar el salario base y otras medidas, como la incapacidad temporal, la jubilación parcial o los permisos por asuntos propios».

También explicó que las organizaciones encargadas de atender a las personas dependientes tienen residencias, centros de día, pisos tutelados y centros de atención temprana, entre otros, en los que trabajan unas 4.200 personas.

Otras 3.500 desarrollan su labor en los centros especiales de empleo destinados a la inserción laboral de las personas con discapacidad. En los centros de Educación Especial concertados hay otras 200 personas trabajando, entre los que se incluyen los profesores. En total, estas instituciones emplean en la Región a unos 8.000 trabajadores.

Fueyo resaltó que se trata de organizaciones que se financian en la mayoría de los casos con subvenciones del IMAS.

Por eso piden a la Administración regional que cree «una Mesa de la Discapacidad en la que estén representada la Comunidad, los sindicatos y las patronales».

El responsable de servicios Socioeducativos de la Federación de Enseñanza de CC OO asegura que el sindicato está dispuesto a convocar paros en los centros de trabajo si no son atendidas su reivindicaciones.